La permanencia se vuelve más difícil todavía para el Viveiro

I.M.B. VIVEIRO / LA VOZ

A MARIÑA

PEPA LOSADA

Necesitará acabar séptimo por la cola para no depender de los ascensos gallegos a Segunda B

15 may 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

La permanencia en Preferente se ha encarecido todavía más para el Viveiro por los acontecimientos vividos en el tramo final de Tercera División. El Laracha, que parecía a salvo no hace mucho tiempo, no consiguió ganar ninguno de los tres últimos partidos y, en principio, desciende a la categoría autonómica empujado por la caída del Racing de Ferrol de Segunda B -el Cerceda arrastra al Cultural Areas-. Por lo tanto, y teniendo en cuenta que el Noia y el Negreira acabaron en puestos de descenso directo y también ingresarán en el grupo norte de Preferente, el conjunto viveirense deberá finalizar el campeonato con seis equipos por detrás para no depender de los ascensos gallegos a Segunda División B.

A falta de solo dos jornadas para el final de la liga regular, el Viveiro es quinto por la cola con 40 puntos, dos por encima de la zona de descenso directo y a la misma distancia de la plaza que le evitaría estar pendiente de la suerte del Compostela, el Bergantiños, el Vilalbés y el Alondras, los representantes gallegos en la fase de ascenso a Segunda B.

El efecto dominó también afecta al Ribadeo, que tiene prácticamente asegurada la cuarta plaza del grupo pero no disputaría la promoción de ascenso a Tercera. Ni siquiera ganando el Coruxo el «play-out» en Segunda B, puesto que si producen saltos gallegos a la categoría de bronce del fútbol español los primeros beneficiados serían los conjuntos de Tercera que bajan por arrastres -Cultural Areas y Laracha-, y los protagonistas de la eliminatoria entre los terceros clasificados de Preferente Galicia, que de acabar así la Liga serían el As Pontes y el UD Atios.