«Hay que levantar la cabeza, tenemos la suerte de estar en club grande y podemos ganar otros títulos»

I.M.B.

A MARIÑA

PEPA LOSADA

Julio Delgado admite que el Burela no estuvo a la altura en la final de la Copa Galicia ante el Poio

03 abr 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Nada de excusas, quejas o lamentos. El entrenador del Pescados Rubén-Burela encajó con deportividad y de manera muy natural la inesperada derrota por 5-4 en la final de la Copa Galicia ante el Poio Pescamar, en un partido frenético que se volvió cardíaco en el tramo final con la remontada de las naranjas y el posterior gol de las pontevedresas cuando la prórroga parecía inevitable. Jenni Lores marcó a 24 centésimas del final en un saque de esquina y dio al Poio un nuevo trofeo autonómico, el segundo consecutivo. El técnico burelista asume sin reparos la poca inspiración de sus pupilas y la superioridad de su adversario.

-¿Cómo está? ¿Decepcionado, triste, dolido...?

-El sentimiento es de tristeza porque se nos ha escapado un título, no puedo estar contento. Pero el deporte es así de duro a veces, nos ha tocado sufrir el lado amargo y tenemos que aceptarlo.

-¿Y la plantilla?

-Un poco fastidiada también. Muchas jugadoras tenían ocasión de festejar su primer título con esta camiseta y se ha escapado, no ha podido ser. Pero no podemos lamentarnos. Hay que levantar la cabeza porque tenemos la suerte de estar en un club grande y estamos en disposición de ganar otros títulos.

-¿Esperaba más de su equipo en esta final?

-Esperaba un poco más en toda la Copa. Ya no hicimos un buen partido contra el Ourense, no supimos manejarlo, y nos ocurrió lo mismo ante el Poio. Vi al equipo bastante atenazado, sin la soltura de otras veces, algo que debemos solucionar de manera urgente porque esto es un deporte y en la pista hay que disfrutar.

-¿Vio el partido perdido con 4-1 y ganado después de empatar a 22 segundos del final?

-Con el 3-0, cuando ya decidimos volcarnos con el portero-jugador, estaba seguro de que tendríamos muchas opciones de apretar el marcador porque es un recurso que dominamos. Cuando empatamos claro que creí firmemente en la victoria, pero luego vino esa última jugada... No hay que darle más vueltas.

-El Poio iba a llegar muy tocado a la prórroga.

-Hablar de hipótesis es ridículo. Lo que tengo claro es que si hubiéramos llegado a la prórroga seguiríamos apostando por el ataque de cinco porque en las situaciones de igualdad ellas estaban siendo mejores.

-Ese gol decisivo a 24 centésimas llega en un córner muy mal defendido por su equipo.

-Encajar cinco goles en un partido ya lo dice todo. Defensivamente no fue, ni mucho menos, nuestro mejor partido. No estuvimos a la altura.

-Su equipo es un claro aspirante a ganar todos los títulos y este parecía el más fácil. ¿Es un fracaso?

-La palabra fracaso siempre me ha parecido muy dura. Es verdad que estamos en un club que apuesta decididamente por el fútbol sala masculino y femenino, y en nuestro caso la plantilla ha sido hecha para pelear por todos los títulos, pero no siempre se puede ganar. Tampoco hay que olvidar, y sin ánimo de que sirva de excusa, que fuimos a Marín con Julia Forsiuk, Sara Correia y Judith sin haber entrenado en toda la semana. Julia incluso ya llevaba dos semanas sin poder ejercitarse con el grupo.

-Una curiosidad. ¿A quién elegiría como mejor jugadora de la fase final?

-De esta Copa no habría que destacar a una jugadora en concreto. Creo que hay que darle un 10 a las aficiones, por supuesto también a la nuestra, que otra vez nos ha ayudado muchísimo, y a la organización, que fue espectacular.

-¿Le preocupa que este palo pueda afectarles en la lucha por la Liga?

-No, no me preocupa en absoluto porque tenemos un equipo maduro en ese sentido y seguro que enseguida cambia el chip y se centra en la Liga. Este sábado ya tenemos un partido muy importante ante el Móstoles.