Un inmigrante vive angustiado desde Viveiro con la desaparición de su hermano en Paraguay

Aurelio Amarilla vive estos días angustiado por la falta de noticias de su hermano Jerónimo. Aurelio lleva trece años en Viveiro donde, señala, trabaja en la construcción y está plenamente integrado socialmente.

Según explicaba ayer, cada fin de semana habla por teléfono con su familia, que reside en Asunción, la capital del país sudamericano. Son cinco hermanos y Jerónimo, explica, vive con su esposa en la casa paterna. El domingo por la mañana cuando los llamó lo notó preocupado, pero no le explicó los motivos de esa preocupación. Ese mismo domingo por la tarde, Jerónimo salió de la casa familiar y no regresó ni fueron capaces de contactar con él por teléfono. La esposa, explica el inmigrante viveirense, denunció la desaparición al día siguiente y desde entonces lo están buscando.

En principio no parece que se trate de un secuestro, ya que, según Aurelio, nadie se ha puesto en contacto con la familia para pedir un rescate. Pero estos cinco días (con hoy seis) que han pasado sin saber noticias de él los tiene muy angustiados. Desde Viveiro Aurelio ha enviado mensajes de voz a este hermano desaparecido, pero le salía apagado el móvil. También llama cada día a su país, habló también con otro de sus hermanos, para interesarse por la situación, pero no saben nada. Acudió igualmente a los servicios de inmigración situados en San Francisco, aquí en Viveiro, para pedirles a ver si a través del consulado conseguían noticias. «Apuntaron los datos míos y de mi hermano y quedaron en llamarme».

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