Los Alvarado Albo, referentes de la industria láctea española

La Voz

A MARIÑA

04 feb 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

El año en que Juan Alvarado Albo accedió a la dirección de la Escuela de la Fundación Sierra-Pambley -ocurrió en 1895-, su hermano Ventura, para quien se había convertido en un padre, aún era alumno de ella. Luego, se formó en la Escuela Nacional de Lechería de Mamirolle (Francia) y, cuando regresó, montó en el centro escolar de Villablino una fábrica de quesos y manteca cuyos productos -el queso bebé- se comercializaban con gran éxito en Madrid.

La fama de los hermanos y de la Escuela crecía y crecía como acredita Víctor del Reguero en el Boletín de la ILE. Y en medio de ella, Juan, tras un desengaño amoroso con una mujer llamada Regina Rodríguez Piñero -su padre no permitió su boda con el joven profesor por creer que estaba enfermo- se casó en 1907 por lo civil con Luisa de la Vega Wetter, que era la viuda del naturalista González de Linares y había llegado a Villablino con su hija Genara para ser profesoras de Francés, Comercio y Matemáticas en la escuela de niñas. Era un mujer culta, de madre francesa, próxima a la Institución Libre de Enseñanza y amiga de la esposa de Cossío, su director.

Los años siguientes fueron de gran proyección para los hermanos. Juan fue enviado a estudiar Bacteriología de la industrias lácteas en la Escuela de Agricultura de Surgéres (Francia) y tanto él como Ventura acudieron a numerosos congresos, publicaron muchos artículos en la revista La Industria Pecuaria y se vincularon a la influyente Asociación General de Ganaderos del Reino desde la que asesoraron a empresas y granjas por todo el Estado.

Juan Alvarado, librepensador y republicano, se integró mucho en la sociedad del valle de Laciana. Participó en la defensa de los mineros y en la creación de la Mutua Lacianiega, una sociedad de seguros contra la mortandad del ganado. Colaboró con su amigo Menéndez Pidal en recopilar romances populares del país y él mismo compiló más de 4.000 palabras del patsuezu, el dialecto de la región.

Sus productos, quesos y manteca, se comercializaban con gran éxito

en Madrid