Demolidas cuatro casas en Ribadeo por orden del Concello por su estado de ruina

José Francisco Alonso Quelle
j. alonso RIBADEO / LA VOZ

A MARIÑA

Este año la alcaldía también ordenó limpiar 33 fincas privadas en mal estado

02 nov 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El alcalde de Ribadeo, Fernando Suárez, se muestra especialmente satisfecho de su política, en atribución de las competencias que le otorga la ley, de obligar a propietarios de inmuebles y fincas a tenerlas en buen estado. Insiste en que no persigue penalizar, pero sí considera, en particular con las casas en estado ruinoso, que es obligación de sus dueños tenerlas en unas mínimas condiciones de seguridad y salubridad. Dice que hay subvenciones para acometer mejoras y, de no ser así, siempre se pueden vender. El Concello exige que se hagan reformas y si lo ignoran tramita sanciones y, llegado el caso, la ejecución subsidiaria, pasándole después la factura correspondiente al titular de la finca o casa. Dice Suárez que muy pocos concellos de Galicia actúan con tanto celo como Ribadeo. Y pone datos sobre la mesa que lo acreditan. Por ejemplo, en lo que va de año en el concello ribadense se han demolido cuatro casas por su estado de ruina. Por orden del Concello.

Además, se han incoado once expedientes para declarar en ruina diferentes inmuebles. El Concello tramitó también 12 órdenes para obligar a los titulares de bajos a adecentarlos y pintarlos, otras cinco para muros y 20 expedientes más para la adopción de medidas de conservación y adecentamiento de inmuebles.

En lo que va de año el Concello de Ribadeo ha impuesto también una multa por no acometer las obras requeridas para adecentar un inmueble.

Otro caso llamativo es el de las órdenes que emanan del Concello para obligar a los propietarios de inmuebles y fincas a adecentarlas y desbrozar las parcelas en mal estado de conservación. En concreto, este año se ha instado a 33 propietarios a actuar, bajo la amenaza de sanciones o de que en caso contrario lo haría el Concello.

Resultados a la vista

El resultado de esta política está a la vista. En inmuebles significativos de Ribadeo, como la aduana vieja o la torre vieja de la calle San Miguel, se actuó a instancias del Concello. Otro inmueble destacado es el Cine Colón, sobre el que pesaban varias órdenes de actuación y que finalmente fue adquirido por Paisajes de Asturias, que está avanzando en su rehabilitación como salón multiusos, con varias plantas de aparcamiento. Otro ejemplo lo supone el Bar Cubano, que finalmente fue vendido y reconstruido dividido en varias viviendas. Y en marcha está otra obra significativa, ordenada por el Concello: la mejora del Hotel Ribanova, una actuación importante por las dimensiones del inmueble, que se encontraba en un avanzado estado de abandono, incluso con abundante vegetación en el techo que ya está siendo eliminada.

El pero lo supone la Torre dos Moreno. El Concello es propietario de un 21% de la propiedad, pero tras la intervención hecha hace años para consolidar la estructura gracias a que Paisajes de Asturias se hizo con una parte mayoritaria de la propiedad, no se ha vuelto a hacer nada más. La consecuencia es que la ruina de este icono ribadense avanza, sin que de momento el Concello se exija a si mismo la restauración ni se plantee el futuro que se le quiere dar, algo que inevitablemente habrá que abordar en un futuro más o menos próximo. Se trata de un asunto complicado, vender o no la parte del Concello, cuya resolución a priori debería ser fruto del consenso.