Guardas controlarán el acceso de coches a San Cibrao, y no se puede acampar en A Maruxaina

Desde mañana a las dos de la tarde hasta la misma hora del próximo domingo, las calles del centro de San Cibrao quedarán cerradas al tráfico. Solo podrán entrar y salir vehículos residentes que hayan obtenido los pases gratuitos que facilitó el Concello de Cervo. De controlar de modo eficaz esa restricción depende que automóviles de emergencias, como ambulancias o bomberos, puedan prestar auxilio, de ser necesario. Es el motivo que llevó al gobierno local que preside Alfonso Villares a contratar a una empresa de seguridad privada, de tal modo que serán guardas jurados los que estarán en las vallas de seguridad.

Las restricciones de tráfico afectarán a la Avenida da Mariña, Rúa dos Campos, Aduana y Rosalía de Castro. Es uno de los temas que se trataron ayer en una mesa técnica de la junta local de seguridad de Cervo, en la que también se acordó controlar las acampadas, que aunque hasta ahora se consentían, no estaban permitidas. En esta Maruxaina no se tolerarán en San Cibrao, advierte Alfonso Villares, alcalde cervense.

Durante A Maruxaina también se reforzará la vigilancia, con patrullas de la Policía Autonómica y de la Guardia Civil, que junto a los guardas jurados procurarán «manter a orde», explican desde el gobierno municipal de Cervo.

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