El cierre del faro-hotel de Illa Pancha en Ribadeo en verano: un coste brutal

José Francisco Alonso Quelle
josé alonso RIBADEO / LA VOZ

A MARIÑA

JOSE ALONSO

El concesionario gestiona reabrir y accede a acometer todas las mejoras que le piden

16 jun 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

La sociedad mercantil Eirobra está explorando todas las posibilidades para reabrir cuanto antes el faro-hotel de Illa Pancha, sobre el que tiene una concesión administrativa, después de que el Concello de Ribadeo lo precintara hasta que se corrijan una serie deficiencias detectadas en materia de accesibilidad, saneamiento y abastecimiento de agua. El objetivo para Eirobra es no perder todo el verano, dado que ya tenía fines de semana cubiertos por clientes que habían hecho las reservas.

Dado que esas deficiencias no fueron impedimento para que en su día le otorgaran la licencia de obra, Eirobra decidió presentar una serie de alternativas a las mejoras que le exigían. Pero el Concello las rechazó todas y le obliga a sustituir la tubería existente de la red de agua en un tramo de 485 metros por otra de mayor sección; cambiar la barandilla del puente; instalar cámaras de vigilancia, y justificar la necesidad de disponer de autorización de Augas de Galicia en materia de residuos.

Eirobra alegó que no podía cambiar la tubería del agua porque actuaría sobre dominio público de titularidad municipal y que solo podría hacerlo o bien el Concello o la empresa concesionaria del servicio. También planteó alternativas, como instalar una fosa séptica sin vertido, cuyos residuos son recogidos por una empresa autorizada. Pero el Concello las rechazó.

Llegados a este punto, Eirobra ha accedido a ejecutar todo lo que le pide el Concello y para ello ha tramitado diferentes permisos y autorizaciones. En unos días presentará toda la documentación: «Entregaremos todos los informes sectoriales para poder instalar la barandilla y hacer la traída de agua. Confiamos en que nos den licencia de obra cuanto antes, para iniciar las obras y abrir para salvar algo de la campaña de verano», manifestó José Luis López Braña, de la sociedad Eirobra.

Cada día cerrado le cuesta a Eirobra 50 euros que paga a Puertos, más las reservas anulada

«El daño económico que nos están ocasionando es brutal, tremendo, no solo por lo que pierdes, sino también por lo que dejas de facturar, porque teníamos muchas reservas que no se pueden mantener». Así se manifestaba ayer López Braña. El canon que Puertos ha puesto a Eirobra por la explotación del viejo faro es de unos 18.000 euros anuales, lo que supone 50 euros diarios, con independencia de que los apartamentos turísticos estén abiertos o no. Un canon que ya abonó durante parte del año pasado, aún sin haber iniciado las obras. De hecho, el faro-hotel apenas ha estado abierto unas semanas. En declaraciones a La Voz, hace unos días, López Braña estimó que la inversión, entre obras, trámites, canon y mobiliario, ya ronda los 200.000 euros.

La última exigencia de Suárez: el libre acceso al islote, condiciona todo el proyecto

Un nuevo imprevisto ha surgido para el concesionario del faro-hotel de Illa Pancha, la exigencia del alcalde de Ribadeo, Fernando Suárez, a la Autoridad Portuaria Ferrol-San Cibrao de garantizar el libre acceso al islote, como condición para otorgar la licencia de apertura, con independencia de que Eirobra haga las reformas exigidas. Así se lo transmitió hace unos días Suárez a la Autoridad Portuaria, tras negarse ésta a revisar la concesión del faro. Suárez no quiere que el faro sea un coto exclusivo para algunos, sino abierto a toda la ciudadanía.

Al respecto, López Braña, manifestó: «He tenido conocimiento de ello y espero que lo solucionen entre la Autoridad Portuaria y el Concello, porque es algo que no se exigió cuando el Concello dio la licencia de obra». Inicialmente el acceso al islote se iba a permitir con el bar que se iba a hacer en Illa Pancha. Pero el Concello no autorizó el proyecto y solo permitió acondicionar el viejo faro con dos apartamentos.

La consecuencia fue que solo se permite la entrada a las personas que estén alojadas en el faro-hotel ahora precintado y al personal que lo atiende. La intención de Eirobra es presentar otro proyecto para abrir más adelante el bar, con lo que el acceso sería libre.

Semanas atrás el concesionario denunció la situación de «indefensión» en la que se encuentra, ante actuaciones del Concello que calificó de desproporcionadas y contrarias a derecho, por lo que avanzó que en su momento se planteará la posibilidad de emprender acciones legales para defender sus derechos.