El Pescados Rubén-Burela busca un chute anímico en la cancha del Barça, el equipo que menos goles encaja en casa
15 feb 2017 . Actualizado a las 05:00 h.El Pescados Rubén-Burela dejó en casa el miedo y los complejos en su viaje a Barcelona. Saltará a la cancha del Barça dispuesto a todo, con osadía (20 horas. Palau Blaugrana). «La situación inicial de cinco para cuatro, como ocurrió en Copa del Rey con Magna, podría repetirse para intentar ponernos por delante. Empezar el partido ganando sería muy importante para nosotros; hasta ahora no hemos vivido esa situación», proclamó su técnico, Tomás de Dios, antes de poner rumbo al refugio del cualificado y reputado conjunto culé, que es segundo en la clasificación a solo un punto del Movistar Inter a pesar de estar compitiendo sin sus dos grandes estrellas: Sergio Lozano y Batería.
«En principio es una utopía pensar que podemos ganar en el Palau, pero tendremos que intentarlo», añadió el preparador burelista. En la presente campaña solo ElPozo Murcia fue capaz de asaltar el coliseo blaugrana venciendo por 2-3. El Cartagena (5-4), el Gran Canaria (4-2), el Ribera de Navarra (7-1), el Palma (5-1), el Santiago (7-1), el Jaén Paraíso (5-0), el Peñíscola (6-1) y el Jumilla (6-1) no pudieron contener el empuje y la pegada de un Barça que es además el equipo de Primera que menos goles encaja en los partidos de casa.
Por donde quiera que se mire, el partido presenta una dificultad mayúscula para un Pescados Rubén-Burela que viajó sin Chano, Edu ni Matamoros y atraviesa una de sus peores crisis en la máxima categoría. Roza los puestos de descenso después de nueve derrotas consecutivas y su capacidad goleadora es nula frente a equipos de Primera desde hace cuatro partidos y medio. O lo que es lo mismo, en los últimos 180 minutos de juego. Tomás de Dios lo atribuye a la carga de trabajo. «Aparte de especialistas, la finalización también necesita frescura», razonó el técnico.