Mantas, ropa de abrigo y mudas, de lo más solicitado en los roperos de Cáritas

Inmaculada Eiroá González
inma eiroá VIVEIRO / LA VOZ

A MARIÑA

x. f. r.

Con la llegada del frío, aumenta la demanda en algunos de los centros mariñanos

19 ene 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Con la llegada del frío la demanda de ropa aumenta en algunos de los roperos que Cáritas tiene abiertos en la comarca. Así lo corrobora Mercedes Prieto, una de las colaboradoras del que funciona en San Lázaro (Viveiro).

Las mantas están entre los artículos más solicitados en estas épocas. Explica Prieto que las piden los transeúntes, que las utilizan para taparse en la calle. Algunos se acercan a las instalaciones para darse una ducha caliente y ya se la llevan. Las demandan también los inmigrantes: «El que se viene de emigrante no trae mantas, luego cogen un piso, mete dos o tres camas y necesita mantas», En el ropero, dice, intentan dar respuesta a las necesidades de la gente que acude.

Ahora mismo, dice, necesitan ropa de invierno, porque aunque reciben a diario, sale rápidamente. Están atendiendo una media de cerca de veinte personas diarias, frente a las diez que pueden pasar de media en verano.

Lurdes Prada, de Cáritas de Ribadeo, señala que en el ropero de esta localidad la ropa interior (calzoncillos y camisetas), pero también pantalones de chándal, chaquetones y abrigos y plumíferos son muy demandados. «La ropa interior es lo que más demandan los transeúntes y siempre tenemos remanente. La ropa interior, la compramos nosotros cuando tenemos necesidad», señala Prada, destacando lo mucho que está colaborando la gente: «Entra mucha ropa, sobre todo en la época de cambio de temporada», explica. No detecta, sin embargo, una demanda especial en este momento.

En el de Valadouro, compartido con el municipio de Alfoz, señala Dolores Monterroso, una de las colaboradoras que en estos momentos están pidiendo más mantas que ropa de vestir. La gente «dona muchísimo», afirma, no solo ropa de vestir, sino también sábanas. En Burela, donde según Ana Cruz, «estamos intentando cambiar la forma de trabajar», les demandaron mantas a principio de temporada.

Prendas para niños, libros, o dinero para el viaje de vuelta de algunos inmigrantes

La labor que realiza Cáritas es muy amplia. Desde O Valadouro señalan que, aparte del ropero, situado a pocos metros de la iglesia de Ferreira y que abren los lunes de cuatro a seis o cuando alguien lo precise, previa llamada telefónica, pagan los libros a algunos niños e incluso han pagado el billete de vuelta a un matrimonio de Rumanía que quería regresar a casa tras enfermar gravemente un miembro de la pareja.

Ahora mismo lo que más escasea en este ropero es la ropa de niño de entre ocho y once años.

La ropa infantil es otro de los artículos con más demanda en Viveiro, sobre todo entre la comunidad inmigrante. En este ropero abren en semana, durante todas las tardes, de cuatro a seis o de cinco a siete, menos los jueves que abren por la mañana (los fines de semana, solo si es una emergencia y avisando). Para donar ropa no tienen problema, ya que disponen de un contenedor en el que pueden depositarla.

En Viveiro Cáritas dispone de una casa de acogida con siete plazas, salita, cocina, duchas, calefacción, etcétera, que utilizan básicamente personas necesitadas que residen habitualmente en Viveiro.

En el ropero de Ribadeo abren el segundo y cuarto martes de cada mes, de seis a siete de la tarde. La petición general en todos los casos, es que la ropa que se done esté en buen uso y limpia.