«Tenemos que volver a Senegal, nunca vimos a tantos ciegos con tanto dolor»

La oftalmóloga Ana González y su auxiliar Raquel Vidal han sido los Reyes Magos de millares de niños y adultos en África e India. Ana acaba de regresar de estos dos viajes que realizan una vez al año (Raquel este año no fue a India) y que les valió el premio ONCE a la solidaridad. Solo en Senegal, en la región de Thies, realizaron más de mil consultas y casi 300 operaciones, la mayoría a un tipo de glaucoma que es muy frecuente en la zona y que es especialmente doloroso. De hecho, Ana cuenta que casi todas las intervenciones que realizaron fueron para detener el sufrimiento a los enfermos, porque en la mayoría de los casos no hay manera de recuperar la visión: «Tenemos que volver a Senegal, nunca vimos a tantos ciegos con tanto dolor», confiesa una médico que en Ferrol atiende en el Marcide y en el Instituto Gallego Oftalmológico de la calle de la Tierra.

Ana cuenta que una de las personas que trató era un sastre que tuvo que dejar de trabajar porque el glaucoma lo dejó prácticamente sin visión: «Solo quería que le dejase de doler, le dimos unas pastillas y cita al día siguiente para la cirugía, pero ya no quería moverse de la puerta de la consulta, pretendía pasar la noche allí», rememora emocionada sobre un paciente que se sintió tan aliviado que hasta quería volver a coser para agradecerles con un vestido la ayuda.

Un niño vendrá a España

El viaje a Senegal fue especialmente duro, porque Ana, Raquel y el resto de cooperantes de la oenegé Azul en acción tenían que viajar todos los días varias horas en bus hasta llegar al hospital de Thiadiaye, donde se montó todo un quirófano gracias al material llevado desde el hospital Ciudad de Murcia. El trabajo de esta expedición no ha terminado, porque ahora están volcados en traer un pequeño de unos tres años para operarlo en el centro La Paz de Madrid. «Estamos buscando todas las posibilidades para que venga cuanto antes, hablando con las embajadas...», cuenta una oftalmóloga lucense (de Ferreira de Pantón) afincada en Ferrol.

En poco menos de un mes se enfrentó a los dos viajes, primero el de África y después el de la India. Llegó muy cansada, pero a tiempo para pasar las Navidades en Galicia y con la mente en las expediciones del año que viene. «Nos llegó mucho la gratitud de la gente, las sonrisas con las que nos la transmitieron», cuenta. Eso se suma a la satisfacción que les produjo el hecho de que centenares de personas les donasen sus gafas viejas, que son muy importantes para completar los tratamientos. Por eso las seguirán recogiendo para el próximo viaje en el Instituto Gallego de Cirugía Ocular y en las cinco ópticas Noroeste en Ferrol (en carretera de Castilla y calle de la Tierra), Ares, Fene y Cedeira. También se pueden enviar por correo o contactando con cualquiera de los centros.

África. Ana y Raquel viajaron con un equipo de cooperantes desplazados por Azul en Acción y que operó a 300 personas ciegas, muchos de ellos niños, trató con fármacos patologías oculares de 1127 personas y graduó la vista a otros tantos. Durante 20 días trabajaron durante jornadas interminables de más de 16 horas en condiciones duras, con mucho calor y humedad.

India. Ana consultó y operó en Calcuta y en Anantapur.

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