Vilar, de ser un barrio de las afueras de Ribadeo a capital comercial asturgalaica

José Francisco Alonso Quelle
josé alonso RIBADEO / LA VOZ

A MARIÑA

pepa losada

La inversión de Mercadona y Vegalsa de 4,5 millones es una clara apuesta por el presente y futuro del concello

06 nov 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Hace veinte años, la villa ribadense se acababa en el Restaurante Voar. Era cruzar el puente bajo la vía de Feve y entrar en las afueras, en un barrio, Vilar, donde apenas se contaban unas casas, el Castillo de Nemesio, una suerte de supermercado de los de antes, y apenas dos empresas: Muebles Novo y la Panificadora del Eo. Después había que llegar a Dompiñor para ver la cooperativa del Castillo San Damián. Todo cambió a principios de 2001, con la apertura del hipermercado de Eroski, la primera área comercial de A Mariña. Desde entonces han pasado 16 años en los que Vilar no ha dejado de crecer, consolidándose como la gran área comercial asturgalaica desde Ferrol y Avilés.

Hace 16 años, la ubicación estratégica de Ribadeo y las expectativas que suscitaba el proyecto de la autovía hacían de la villa ribadense un lugar apetecible para invertir. No lo vio solo Eroski. Gadisa y Continente pusieron sus ojos para construir áreas comerciales. De hecho, en 1999 las tres llegaron a presentar escritos en el Concello confirmando la adquisición de terrenos o compromisos de compra: Eroski, 31.100 metros cuadrados en Vilar; Gadisa, 27.865 en Veiga da Cruz da Lodeira, y Latvhis (intermediario de Continente) 40.250 metros.

Al Parlamento de Galicia

Finalmente solo prosperó el proyecto de Eroski. Y para ello fue preciso que recibiese autorización del Parlamento de Galicia, ya que Ribadeo no cumplía con el ratio de habitantes exigido por Comercio para autorizar un área comercial. Al final se hizo valer la «caída» de Ribadeo, su población flotante en Asturias y el resto de A Mariña, para autorizar una sola licencia.

En julio de 1999, la Comisión Consultiva de Equipamentos Comerciais de la Xunta se reunía para valorar dos proyectos de superficies comerciales en Ribadeo, de Eroski y Gadisa. Solo uno podía prosperar y fue el del grupo vasco. Eroski hizo una inversión inicial de 208 millones de pesetas y contrató a 84 personas, la mitad de Ribadeo y un 23% de Foz. Fue su primer híper en Galicia.

En aquel momento se ofreció a los comerciantes de Ribadeo instalarse en puestos complementarios, pero tras un largo debate, Acisa declinó esta posibilidad y apostó por la creación del Centro Comercial Abierto y el fomento del comercio tradicional y de proximidad. Con el tiempo se demostró que fue todo un acierto, al convivir y complementarse el área comercial de Vilar con los establecimientos de la villa.

Tras Eroski abrió la cafetería del Rey das Tartas y sucesivamente, una gasolinera, Brico King, Lidl, Decathlon, Merkal, la gasolinera de Valcarce y un híper chino en una nave de nueva construcción. Y en torno a Vilar, la actividad siguió creciendo, con más negocios y empresas. Mercadona ha sido el último en sumarse, así como un nuevo híper chino, a unos metros. La inversión de la compañía asturiana ha sido de 2,4 millones de euros y ha creado 28 puestos de trabajo.

Pero el híper de Eroski, tras su reapertura hace unos días, se puede considerar casi un nuevo establecimiento. Vegalsa ha invertido dos millones de euros en renovarlo, actualizarlo y crear nuevas secciones, y tiene pendiente cubrir parcialmente el aparcamiento. En la actualidad tiene 69 empleados.

¿Tiene aún margen de crecimiento Vilar? Quizás. Quién podía suponer hace 16 años que iba a llegar a lo que hoy es.

«La pena es que Mercadona no esté en el centro del pueblo»

El presidente de la asociación de comerciantes de Ribadeo, David Martínez, zanja el supuesto debate a las primeras de cambio. ¿Beneficia o perjudica la zona de Vilar al pequeño comercio tradicional de Ribadeo? «La pena es que no esté en el centro del pueblo. Mercadona tiene en estos momentos un tirón enorme y no hay ninguno de sus supermercados en el Occidente de Asturias. Que haya abierto es positivo, sin duda, porque capta más gente que viene a Ribadeo y compra y consume en Ribadeo. El mercado de la alimentación está en manos de las cadenas y, en el caso de Mercadona, había mucha gente de Asturias que iba a comprar a Foz y que ahora, en teoría, lo hará en Ribadeo».

-¿Es ahora Ribadeo más centro comercial de referencia que nunca?

-Que Ribadeo es cabeza de comarca se demuestra a diario. Cuando estas grandes cadenas se instalan en Ribadeo es porque hay estudios de mercado que lo respaldan. Esta gente no da puntada sin hilo.

-Pero estas grandes cadenas también son competencia.

-Lo son, pero el problema ahora es que además de la crisis económica hay una crisis de consumo que afecta al pequeño comercio. Si la gente compra por Internet hace que Amancio Ortega y cuatro más sean cada día más ricos, mientras si compras en la tienda de al lado estás contribuyendo a que tu pueblo se mantenga y crezca. Nosotros desde Acisa luchamos para que la gente se dé cuenta de eso. Ahora mismo tenemos en marcha una campaña que incide en ello. Hay que consumir en el pequeño comercio, porque solo del turismo no se puede vivir.

-¿Y hasta qué punto es importante para Ribadeo el cliente asturiano?

-Es importantísimo, tanto o más que el gallego. De hecho, hay negocios que tienen más clientes de la zona de Asturias que del resto de A Mariña. Ribadeo no es frontera de nada, está situado estratégicamente y se beneficia de ello. En Ribadeo compran muchísimos asturianos, pero también hay aquí muchos negocios que han sido montados por asturianos y que tienen asturianos al frente.