
As San Lucas revalidan su poder de convocatoria y atraen multitudes a la ciudad
17 oct 2016 . Actualizado a las 05:00 h.«É como si fora o día grande das San Lucas». Lo afirmaban ayer desde la organización. El programa de actos de la jornada era digno de un día grande. Al anochecer, había cola para asistir al concierto de las gaiteiras Cristina Pato y Susana Seivane. Se vendieron 600 entradas, más de las previstas inicialmente. La catedral, donde se celebraba este concierto histórico, estaba literalmente a tope, llena de gente de todas las edades. Lo musical se completaba con Val das Mouras y para la verbena se esperaban las actuaciones de dos orquestas de primera, Principal y El Combo Dominicano.
Los mejores caballos
El caballo fue el protagonista de la mañana, la final de la Copa Galicia de Pura Raza Galega, que organizaba la Asociación Pura Raza Cabalo Galego. Los campeones absolutos fueron el caballo Jalisco y la yegua Támega, de la Gandeiría Freire Abad (Oza-Cesures). Jalisco se llevó también el primer premio en el apartado de sementales; el segundo fue para Torete, de la Asociación Cabalo Galego; el tercero para Comanche, de José Manuel Costa (Muras); el cuarto para Pancho, de Ramón Suárez (Zas-Baio). En el apartado de yeguas, ganó Shakira, de Gandeiría Fontenla (A Estrada); segunda quedó Leixa, de José Fandiño (Ferrol); tercera Estrella, de Antonio Porca (Ferrol) y cuarta Támega.
Y la cultura, la historia, los homenajes, fueron protagonistas de la tarde. Hubo reconocimiento a Xosé Vizoso, por los 50 años que lleva colaborando con As San Lucas, creando los característicos carteles que se han convertido en una seña de identidad de las San Lucas.
Homenaje a As Irmandades da Fala en el año del centenario de su fundación y entrega del Premio Mondoñedo10, en la modalidad de narrativa. El jurado lo otorgó por mayoría al escritor Manuel Rivas, por su obra Os libros arden mal. El autor acudió a Mondoñedo a recogerlo.
Y en las calles de la ciudad, un ir y venir constante, puestos, pulpo, encuentros. As San Lucas ya se ha instalado de lleno en Mondoñedo.