En «Historias Tattoadas» vuelve a recurrir a su compromiso social
10 ago 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Macaco es el primer artista que suena con fuerza en el cartel del Why Not Here Fest? El festival focense, que abre sus puertas desde mañana hasta el sábado, ofrecerá en la primera jornada su concierto (22.00), junto a otros grupos.
-Está a punto de llegar a Foz. ¿Dónde le toca actuar antes de venir?
-Esta es una semana intensa, con cociertos en Benicasim, Huelva...
-Es la primera edición de este festival, que quiere ser un puente musical entre bandas de España y América. ¿Cómo encaja ese espíritu con su música?
-Va muy unido a mí. Yo soy un artista que ha viajado mogollón y ha estado acompañado por músicos de todo el mundo. Me he rodeado de ellos tanto en mi barrio como en otros lugares latinoamericanos, adonde viajo desde hace muchos años. En octubre estaré por Colombia, Ecuador, Perú... Por eso esta propuesta me parece interesante. Me gusta apoyar a los nuevos festivales. Además, hay mucha demanda, el público quiere festivales medios de capacidad. Por otro lado, soy fan de Galicia, de su comida, sus gentes...
-Bueno, a veces el clima falla. Aviso.
-Vamos a cruzar los dedos y que la lluvia se contenga, que se necesita más en otros partes.
-Hará unos diez años que actuó en Viveiro. Quizás no lo recuerde...
-Me paso la vida en la carretera, pero me quedan las sensaciones. Recuerdo a la gente súper entregada y todo lo que rodea esas tierras maravillosas...
-Y en una década, ¿en qué ha cambiado Macaco y en qué no?
-Me gusta pensar que somos evolutivos. Desde luego intento mirarme al espejo, estar contento con lo que soy y ver que puedo cambiar, a nivel personal y musical. Dentro de lo que he conseguido es sonar a mí mismo. Es un éxito, pero no quiere decir que me considere el mejor cantante del mundo, ¡ni mucho menos! Dentro de lo que es Macaco, me interesa la canción en si, Lennon, Marley... los «abuelos» que me han influenciado, los pilares.
-¿No ha experimentado el dilema entre lo que quiere ser y lo que se pide comercialmente?
-No lo he tenido nunca y ni lo espero. Creo que les pasa más a otro tipo de artistas. Las etiquetas no me gustan y tengo la de «alternativo» que suena en los medios de comunicación, que tardaron en poner mi música, pero estoy creciendo a través de conciertos. Por suerte, pude montar un segundo sello y me lo distribuye la discográfica. Saben de lo que voy. Aunque sí que acepto opiniones constructivas de mi alrededor, al final tengo que poner mi filtro y hago lo que me nace dentro, siempre con mucho amor.
-Profesionalmente, ¿le ha funcionado el hecho de ser un artista genuino?
-Creo que he tenido mucha suerte. Hay otros artistas que son más intérpretes pero a mí no me interesa ser solo una voz, sino un conjunto de palabras, como las sacas, mides y te dan un color.
-El Why Not Here Fest? también quiere ofrecer música con mensaje. ¿El suyo?
-La gente siempre me ha visto como un «músico social», como un cronista del colectivo. Transformo cosas que veo a mi alrededor y la gente sabe que ha habido implicación de Macaco con situaciones sociales. Tengo un repertorio con canciones como SOS o Madre Tierra, sobre el tema medioambiental, y en el último trabajo, Historias Tattooadas, Semillas que ha traído mucha polémica. Habla de los transgénicos [colabora en un vídeo de Greenpeace]. También hago canciones de amor. Una cosa no quita la otra, pero siempre hay un discurso en mi música.