El agua tarda de tres a cinco días en filtrarse al interior de Rei Cintolo

Inmaculada Eiroá González
INMA EIROÁ MONDOÑEDO / LA VOZ

A MARIÑA

La cavidad cuenta con charcos y lagos en su interior, más o menos llenos según la época del año.
La cavidad cuenta con charcos y lagos en su interior, más o menos llenos según la época del año. p. losada

El Concello de Mondoñedo duplicó casi la oferta de visitas a las cuevas

18 may 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

El Concello de Mondoñedo, con la colaboración de la Federación Galega de Espeleoloxía, ha duplicado casi la oferta de visitas a la Cova do Rei Cintolo. Hasta hace poco tiempo recibían como máximo en el fin de semana cinco grupos y en la actualidad pueden llegar hasta nueve. La alcaldesa de Mondoñedo señalaba recientemente que la idea es atender a todo el mundo, no decirle «no» a nadie.

La cavidad mindoniense constituye un recurso único en su género en la comarca y dentro de Galicia es excepcional. Cuenta con más de quince kilómetros de galería, de los cuales están explorados cerca de siete. Pero las visitas guiadas, para gente que no es especialista, que no practica espeleología, se realizan sobre un recorrido de 300 metros, en la galería principal.

Cualquier época del año es buena para visitar la cavidad. El arqueólogo municipal y coordinador de las visitas, Abel Vigo, explica que hay gente que cree que si llueve no se puede realizar el recorrido. Están equivocados . «Despois dun trebón importante, a auga tarda de tres a cinco días en filtrarse abaixo», afirma Vigo. «Nótase que hai un aumento de goteo nas zonas de filtración, que hai máis humidade nas paredes e que a película de auga é máis clara. Os charcos interiores teñen máis auga, pero nunca hai inundación. O lago é como unha bañeira, chega a uns niveis máximos e nunca pasa desas marcas; en algún punto verte, ten algún desaugue, aínda que non se sabe por onde», señala.

En épocas de calor ni siquiera llega a penetrar la lluvia, la cubierta vegetal superior la absorbe. Las «mareas» del agua dentro de la cavidad cambian entre octubre y noviembre. A Partir de ahora va descendiendo el nivel del agua y hacia finales de octubre vuelve a subir.

Son curiosidades que el arqueólogo municipal ha podido constatar en sus reiterados recorridos por el interior, donde las estalactitas, estalagmitas, gours, coladas, columnas y banderolas conforman un paisaje mágico que la oscuridad interior hace aún más bellas.

Visitar la cavidad (el recorrido dura entre unha hora y cuarto y hora y media) cuesta 15 euros. Hacen grupos de entre cuatro y diez personas, aunque ahora hay la posibilidad de hacer en exclusiva el recorrido, asumiendo el coste de cuatro entradas. Ya hay gente que lo demanda, dicen.