En un fin de semana de lo más lluvioso, la localidad viverense honró a San Xulián con actos religiosos y gastronomía
10 ene 2016 . Actualizado a las 05:00 h.El mal tiempo siempre invita a comer. Y ayer quedó bien demostrado en Landrove, Viveiro, donde fueron muchos los que participaron en la Festa de San Xulián. A pesar de la lluvia no faltaron los fieles a la misa solemne, que comenzó sobre las siete de la tarde. A continuación estaba prevista la actuación de la CCTT Banda Nosa Señora da Misericordia. Y, para rematar la fiesta, estaba prevista la degustación de un gran bollo preñado. Desde la organización confirmaron que el boño preñado medía alrededor de 40 metros, aunque estaba repartido en tramos por diferentes mesas. Estaba relleno de beicon y chorizo y fue elaborado por las manos profesionales de Panadería de Muras. La asociación cultural deportiva Pequenos Pasos de Landrove, que preside Carmen Varela, se ocupó de la organización de esta fiesta, que tuvo el apoyo del Concello de Viveiro. Después de la cena estaba previsto continuar la fiesta con la actuación del dúo D?Cine, bajo una carpa. La organización lamentó que la lluvia restara afluencia al evento.