«Wwoofers» de varios países acuden a Tapia a aprender el ecocultivo

A MARIÑA

En la Finca El Cabillón les enseñan los secretos de la horticultura

25 ago 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

En una época en que la ecología, lo zen y todo lo relacionado con estas formas de vida está tan en boga, gana cada día más adeptos la corriente Wwoofers.

Son voluntarios que se inscriben en la WWOOF (World Wide Opportunities on Organic Farms, organización fundada hace más de cuatro décadas) para aprender y trabajar en granjas ecológicas.

En la Finca El Cabillón, de Tapia de Casariego, llevan ocho años con esta experiencia y afirman que siguen recibiendo voluntarios que llegan con la intención de ayudar en las tareas de su huerta ecológica, desde sacar hierbas a recolectar judías, arándanos o frutas. A cambio de alojamiento y comida, trabajan en la huerta y aprenden a cultivar en ecológico, al tiempo que practican el idioma y conocen nuevos lugares y gentes.

Desde El Cabillón señalan que para ellos es una experiencia positiva que permite «poner en valor otra forma de obtener alimentos, de relacionarse con la naturaleza, y con los/as consumidores, que cada vez más se decantan por un consumo responsable, de producto ecológico, local y de temporada».

Experiencia enriquecedora

Aseguran que es muy enriquecedor para todo el equipo compartir e intercambiar trabajo, conocimientos y momentos de ocio o con gentes de otros países, de otras comunidades autónomas, aprender de su cultura, de su gastronomía y otros modos de hacer.