La comparecencia del ministro de Industria fue seguida en A Mariña
18 dic 2014 . Actualizado a las 05:02 h.El ministro de Industria José Manuel Soria dijo ayer en el Congreso que de las tres fábricas que tiene Alcoa de aluminio primario, «en una adoptó una estrategia, bajó hasta donde tenía que bajar, obtuvo lo que quería obtener». Alcoa -reiteró el ministro- «sí pujó por la fábrica de San Ciprián». Por su parte, el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo, a preguntas del BNG y en la sesión de control del Parlamento gallego, señaló también que la viabilidad de la planta mariñana «xa se garantiu na primeira poxa», al tiempo que subrayó «á solidaridade deste Goberno con Alcoa, e con toda a súa plantilla».
Por su parte en el Senado, el socialista Ricardo Varela calificó la subasta de «ruleta rusa anual que un ano ou outro dará un tiro mortal á factoría se non se cambia o método».
Y desde galicia, el parlamentario mariñano del PP, José Manuel Balseiro insistía «na urxencia dunha poxa extraordinaria», y apuntaba como «imprescindible» para blindar la situación laboral de Alcoa, y superado este momento, se establezca un «marco de diálogo que articule novas solucións a medio e longo prazo».
El comité disientecon Soria
El presidente del comité de San Cibrao, José Luis Combarro, consideró que la intervención de Soria «es desafortunada, porque decir que San Cibrao obtuvo lo que quería en la subasta no es exacto. Necesitaba cuatro paquetes de 90 megavatios y solo consiguió 3». Combarro explicó que la fábrica mariñana «por su sistema de fabricación del aluminio, con una tecnología diferente, hace que sus costes se reduzcan un poco más y que consiguiera los tres bloques a un precio más bajo, pero la situación genera incertidumbre para el próximo año». Un precio competitivo y con plazos «más allá de un año» reclamó.