«Adoro la ría de Viveiro»

Mar García Balseiro
MAR G. BALSEIRO VIVEIRO / LA VOZ

A MARIÑA

PEPA LOSADA

La investigadora dice que A Mariña nada tiene que envidiar al resto de Galicia

01 jun 2014 . Actualizado a las 07:07 h.

María Luisa Cazorla asegura que en Viveiro levita. Acompasa su rimo vital al que imprime la pequeña ciudad. «Adoro la ría de Viveiro», sentencia. Cazorla, historiado e investigadora, comisaria en la Expo de Sevilla, y directora del proyecto científico español que en 1991 definió el lugar de Haití en el que pueden estar los restos de la nave capitana de Colón, la Santa María, disfruta «del paisaje y la gente, porque es acogedora, maravillosa. No se si fue Ortega el que dijo que la cortesía es la moneda más barata del mundo. Si no dices sandeces, en Viveiro haces amigos en cinco minutos». Cazorla, de 70 años, «pero solo aparento 69, ¿verdad?», expresa con un finísimo sentido del humor, y con una intensa vida profesional detrás, se plantea un cambio vital. «Dudo entre la bahía de Cádiz o Viveiro», afirma.

- ¿Conocía la zona de antes?

-Mi primer contacto con Galicia es en los años sesenta del siglo pasado, porque a mi padre, trabajador de Correos, lo trasladan a Pontevedra. Cuando empiezas a patear Galicia te quedas enamorada de ella. Un paseo por el norte años después supone mi descubrimiento de A Mariña. Y dices, pero bueno, me hacen la propaganda de las Rías Baixas y las Rías Altas, y de esto , ¿no me dicen nada?. Hace seis años, a través de una amiga con vínculos en la Armada de Ferrol vuelvo, y es el redescubrimiento definitivo. Empezando por San Andrés de Teixido llegué a la Estaca, la traje aquí, nos alojamos en el hotel Orfeo, Burela, Foz, Ribadeo... y a medida que la recorríamos me iba enamorando más de la zona. Tanto que al cabo de unos meses me vine sola a Viveiro y me pasé diez días pateando todo, y en el trenecito pequeño [el de Feve] que es maravilloso para conocer pueblo por pueblo. Desde entonces siempre recunco en el mismo sitio, porque adoro la ría de Viveiro, su paz, el encanto que tiene,; la he recorrido a pie completamente. Es una poesía, sentir además la Galicia auténtica que ya no se ve.

-¿Qué ha venido buscando?

-Vine con la intención de bajar unos kilos, ¡pero me encontré con las bondades del lacón con grelos y el choco en salsa!. Todas las mañanas camino de tres a cuatro horas, llenándome los ojos de paisaje, de cielo, de mar, de todo. Lo que no hay duda es que el ser humano no puede vivir con el corazón a 150 todo el día, pendiente de las noticias de la televisión. Incluso anímicamente te tomas la vida con menor prisa, con menos urgencia. Yo vivo en un pueblito pequeño en la Sierra de Gredos, Navamorcuende, donde es posible escuchar a Wagner a 500 decibelios. Allí tengo mi estudio, pero creo llega el momento de cambiar de vida. ¡Y he hecho 18 mudanzas de las gordas a lo largo de mi vida!. Y ahora estoy en dudas. Durante muchos años he pensado que mi final sería en la bahía de Cádiz, uno de los lugares más paradisíacos en la tierra, por la geografía, el carácter, el clima, zona que conozco perfectamente, pero cada vez que subo a Galicia...

María Luisa cazorla directora del proyecto de la «santa maría» en haití