Bienvenida de las patronales mindoniense y laurentina pese a los peros
02 feb 2014 . Actualizado a las 07:00 h.Bienvenida sea la Autovía, a pesar de las deficientes conexiones que quedan en Mondoñedo o de las reticencias que genera.
Para el presidente del ACIAM de Mondoñedo, Manuel Tapia, contar con una vía que les conecta con todo el norte de España y Francia y con el interior es siempre positivo. De hecho, cree que en Mondoñedo, con el tramo sin terminar, ya se detectaron sus beneficios: «Na hostalería xa se notou este vrao último, houbo máis afluencia de xente, sobre todo vascos e asturianos».
Pero Tapia hace énfasis en una cuestión que también ha sido planteada en un pleno celebrado esta misma semana por la corporación mindoniense y es la necesidad de que Fomento se implique en la señalización, colocando paneles indicativos que indiquen a los conductores que transitan por la autovía de que han llegado a A Mariña y luego, de que están cruzando los distintos concellos. En el caso concreto de Mondoñedo, tanto desde la corporación como desde la patronal, instan a Fomento a señalizar también que Mondoñedo es conjunto histórico.
Su otra demanda hace referencia a la necesidad de que Fomento arregle y mantenga en buen estado la N-634, que será con toda probabilidad la carretera que utilicen los vecinos del casco para acceder a la A-8, una alternativa más cómoda, cree, que la LU-124 y que, a su entenderm no usarán los vecinos del casco urbano, a los que resulta más cómodo entroncar por la carretera nacional en la Xesta o por A Voltiña.
A su homólogo laurentino, Víctor Manuel Penedo, presidente de ACIAL, la A-8 le genera más dudas que certezas. Hasta ahora no han visto beneficios y teme que la hostelería salga perjudicada si los que bajaban el fin de semana a las playas, dejan de hacer parada en Lourenzá como ocurría en el pasado y se van directo a sus puntos de destino. Para la hostelería le ve aspectos positivos y negativos. Personalmente cree que «hai que pelear polos do pueblo que che dan de comer os doce meses do ano e logo o que veña a maiores, benvido sexa».