El neurocientífico y divulgador focense inició hace varios días en África un viaje por los distintos continentes que durará más de un año
17 oct 2013 . Actualizado a las 07:01 h.Desde A Illa de Arousa salió la última expedición para recorrer el mundo. Sin ánimo de conquistar territorios, el neurocientífico y divulgador mariñano Xurxo Mariño recorrerá durante más de un año tierras de distintos continentes con un objetivo clave: «Entender mellor este mundo coñecendo ás súas xentes, a súa maneira de vivir e os seus problemas». Es un viaje preparado, soñado, distinto. No hay fondos públicos. Los ahorros del explorador Mariño y su pareja, Eli, alimentan este ambicioso proyecto personal que vio la luz a comienzos de mes en Cabo Verde.
Desde Santo Tomé y Príncipe el dinamizador de los cafés científicos y promotor del discurshow nos adelanta cuáles serán las próximas etapas; recorrerán Namibia en vehículos 4x4, volarán sobre Botsuana (con varias paradas en campamentos) y descubrirán Sudáfrica en avión, coche y tren. Desde África continuarán su viaje por América, recorrerán el continente desde Tierra de Fuego hasta Alaska, para luego proseguir la expedición por el Pacífico, Nueva Zelanda, Australia «e despois por Asia, ata China, Mongolia, Rusia...». Como final de camino, Compostela, donde reside.
De los primeros días de viaje ya ha extraído sus primeras impresiones: «O que máis me ten sorprendido ata o momento é o pouco e mal que coñecemos algúns países de África, a súa xente e as súas gañas de sacar adiante estes países nos que viven». Y aunque la planificación de la expedición tiene su peso en este periplo por el mundo, el espíritu de este aventurero y neurocientífico del grupo de Neurociencia y Control Motor de la Universidad da Coruña (Neurocom) necesita de la improvisación: «Metémonos por onde nos leva a curiosidade ou onde temos intereses específicos relacionados coa xeoloxía, a gastronomía... depende de cada sitio concreto. Estamos vendo que en África é moi sinxelo arranxar un percorrido local con algún habitante da zona».
Como en el «Beagle»
Aunque el focense reconoce no tener ningún explorador por ídolo, seguro que no le importaría retroceder en el tiempo y subirse al Beagle en el que navegó el naturalista Charles Robert Darwin para sus investigaciones científicas. Consciente del momento que le ha tocado vivir, Mariño viaja libre de prejuicios y provisto de un equipo que nos permiten contactar con él y disfrutar de la experiencia de su viaje, que relata día a día en su blog. Días antes de partir hacia África, Mariño anunciaba que entre sus compañeros de viaje se incluía una cámara compacta Canon y una Sony Nex-6; un mini PC y una tableta; un teléfono satélite con cobertura global salvo en los Polos; unos prismáticos compactos, tarjetas de memoria... y una maleta cargada de ilusión y curiosidad por descubrir el mundo.
¡Boa viaxe compañeiros!