La decimotercera jornada en el grupo norte de la Tercera División de fútbol sala fue muy provechoso para el Superti-A Pontenova y el Concello de Trabada. Ambos conjuntos vencieron a rivales directos en su lucha por clasificarse para la fase de ascenso y comerán el turrón con un buen colchón de puntos sobre sus máximos perseguidores.
El Superti-A Pontenova es el que está más próximo a certificar su objetivo. Los de Manolo Cadramón han sabido sobreponerse a su derrota ante el Trabada y en las dos últimas jornadas han derrotado con claridad al Pizzbur Cidade de Viveiro (3-8) y al Ventorrillo FS: 10-5. Este último triunfo sitúa a los pontenoveses con diez puntos de ventaja sobre los coruñeses -estos han jugado un partido menos-, equipo que marcha en la quinta plaza, primero de los que no jugarían por el ascenso.
Mientras tanto, los trabadenses dieron otro golpe en la mesa venciendo al Ribeira de Piquín (7-4), otro de los conjuntos inmersos en la batalla por terminar entre los cuatro mejores. Tras un inicio de temporada titubeante, los pupilos de Andrés López acumulan diez jornadas consecutivas sin perder y sus últimas victorias ante O Esteo, Superti y el propio Ribeira de Piquín, junto al empate en su visita al Ventorrillo, los han aupado a la tercera plaza, a siete puntos de los herculinos, pero con un partido más jugado.
Finalmente, el Pub Flanagan?s Xove y el Pizzbur Cidade de Viveiro cayeron ante O Esteo (2-1) y Caloto-Loyo (7-0), respectivamente, y prácticamente enterraron cualquier opción de meterse en las fase de ascenso. Los xovenses merecieron mejor suerte en su visita al líder e incluso mandaron tres balones al poste.