La mejora del asilo de Mondoñedo se aplaza y reduce por falta de dinero

i. e. MONDOÑEDO / LA VOZ

A MARIÑA

El obispo mindoniense explicó que Mensajeros de la Paz está gestionando la legalización de la residencia

19 ago 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

En la Residencia San Rafael, como denominan en Mensajeros de la Paz al viejo asilo de Mondoñedo, se da atención en la actualidad a 48 personas. Así lo confirmaba ayer mismo la directora de este centro benéfico, que fue creado a finales del siglo XIX por iniciativa de la familia Pardo-Montenegro, que dejó un importante legado para sostenimiento de la institución.

El centro ha pasado por diversas vicisitudes en los últimos años. Al margen del conflicto que se abrió cuando el anterior obispo de Mondoñedo creó en 1933 una nueva fundación para regentar el asilo, está la precaria situación que presentan las instalaciones.

En 2009 la fundación había solicitado licencia para realizar obras de mejora en la residencia, pero las obras no se han iniciado aún por falta de medios económicos. Así lo confirmaba ayer el obispo actual, Manuel Sánchez, señalando que las obras para las cuales les dio licencia el Concello requerían una inversión superior a dos millones de euros; el obispo explicó ayer que para reunir esa cantidad tendrían que vender todas las propiedades de la fundación y no les parece una solución adecuada descapitalizarla hasta ese punto, quedándose sin ningún recurso para afrontar cualquier emergencia. Además, señala el obispo que la mayor parte son fincas que llevan arrendadas dos y tres generaciones y cuyo valor ha bajado mucho en la actualidad.

La alternativa que están barajando, dijo, es reducir el área de actuación. Según monseñor Sánchez, están haciendo gestiones, a través de Mensajeros de la Paz, para que la Xunta autorice mantener abierta la residencia y que les aprueben un plan de actuaciones más reducido.

Asociación de la Tercera Edad

Por su parte, la Asociación Mindoniense de Axuda á Terceira Idade ha convocado dos asambleas para hoy, en la Casa da Xuventude. En la primera, fijada para las ocho, se debatirán y aprobarán, si procede, las cuentas del 2010. El colectivo cuenta con casi diez mil euros en sus cuentas; también decidirán sobre el presupuesto de 2011, entre otras cuestiones. La segunda asamblea es a las nueve y en ella de abordará la renovación de la directiva.