Una hidroeléctrica y una mina de oro sublevan a mariñanos y asturianos

La Voz VIVEIRO /LA VOZ.

A MARIÑA

18 may 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

Apelan a los daños medioambientales, en su más amplio sentido, como principal argumento de su oposición frontal a dos obras. Vecinos de las dos orillas del Eo y de la localidad asturiana de Tapia no parecen dispuestos a consentir interferencias en la riqueza natural y paisajística de dos zonas protegidas, la Reserva de la Biosfera Oscos-Eo-Terras de Burón y el litoral del occidente astur. Colectivos ecologistas y de pescadores fluviales, así como gobiernos locales de los catorce municipios lucenses y asturianos incluidos en la reserva rechazan el proyecto para construir una central eléctrica en el tramo del río Eo que discurre por parte del territorio que abarca, en tierras de Ribeira de Piquín. El Principado de Asturias, el Concejo de Tapia, asociaciones vecinales y de ecologistas llevan años frenando la explotación al aire libre de la concesión de Salave, considerada uno de los mayores yacimientos de Europa.

A la Confederación Hidrográfica del Cantábrico compete resolver las alegaciones presentadas contra el proyecto de hidroeléctrica en el curso del Eo. Entidades públicas y privadas esgrimen la defensa de la riqueza de la flota y de la fauna del cauce, así como de su entorno, como argumento clave.

La obra consiste en una toma de agua del Eo, a 236 metros sobre el nivel del mar, para devolver al río los 9.940 litros derivados casi 63 metros más abajo. El canal por el que se desviaría el agua mediría casi nueve kilómetros. Dos turbinas permitirían producir 3.929 kilovatios.

Catorce municipios

Entre los numerosos pronunciamientos en contra de la hidroeléctrica, los de los gobiernos locales de Ribeira de Piquín y A Pontenova. Darío Campos, regidor pontenovense, confirmó que los municipios de la Reserva de la Biosfera Oscos-Eo-Terras de Burón preparan otro. Sostienen que esa infraestructura entra en contradicción con el desarrollo basado en la riqueza natural que pretenden implantar en el espacio natural que conforman, en la ribera gallega del Eo, Negueira de Muñiz, A Fonsagrada, Baleira, Ribeira de Piquín, A Pontenova, Trabada y Ribadeo; y, por la asturiana, Santa Eulalia de Oscos, San Martín de Oscos, Villanueva de Oscos, Taramundi, San Tirso de Abres, Vegadeo y Castropol.

Concello de A Pontenova y Centro de Iniciativas Turísticas de la localidad preparan conjuntamente un alegato de rechazo a la central eléctrica. Y para este domingo está anunciada en la localidad una concentración de protesta. Paralelamente, la oposición también se transmite a través de internet, mediante la plataforma Axúdanos a conservar o noso río, creada en Facebook.

Ya se han personado en contra de la hidroeléctrica entidades como la Sociedad de Pesca Rodeo, de Ribeira de Piquín; el colectivo Ríos con Vida o la Asociación para a Defensa Ecolóxica de Galicia. Sostienen que perjudicaría a diferentes especies arbóreas, así como a la riqueza piscícola de un río, como el Eo, que sobresale como salmonero en España.