El Centro Comercial Aberto conmemoró el Día de la Madre en las calles del centro de la villa ribadense obsequiando a las progenitoras con una flor
04 may 2010 . Actualizado a las 02:00 h.Risas, sorpresa, agradecimiento, extrañeza... De todo hubo en Ribadeo la mañana del domingo. Los responsables del Centro Comercial Aberto de esta localidad mariñana decidieron conmemorar el Día de la Madre con una campaña original, diferente a todas las realizadas en los años anteriores. Qué mejor que agasajar a las progenitoras. La idea cuajó en seguida y a lo largo de la mañana del domingo, con todo el comercio abierto, repartieron mil claveles entre las madres que paseaban, salían a efectuar compras o a tomar algo con sus familiares y amigos en Ribadeo. «Estamos en el mes de las flores por excelencia y con flores vamos a celebrar el 2 de mayo el Día de la Madre», explicó Beatriz Irigoyen, gerente de la entidad empresarial ribadense.
Así fue. Las madres que transitaban por las calles comerciales, en el centro de la villa ribadense, se encontraban con gente distribuyendo claveles. El casco viejo se llenó de color, gracias a una iniciativa aplaudida por la mayoría. El buen tiempo animó la mañana y el homenaje a las mamás gustó, tanto a ellas como a sus hijos y al resto de personas que las acompañaban esta jornada.
«Queremos que todas ellas se sientan especial, como dice nuestro eslogan», había dicho Irigoyen. Y así ocurrió. Las madres ribadenses o las foráneas que optaron por pasar la mañana del domingo en esta localidad se encontraron con un obsequio inesperado, que se sumó a los recibidos por muchas de ellas, de manos de sus hijos. La idea triunfó, entre la expectación de la gente que circulaba por las avenidas peatonales más transitadas de Ribadeo. Desde las once hasta las dos de la tarde, la villa ganó colorido y alegría, con las mamás más jóvenes y las ya abuelas.