«Ojalá que Lugo llegue a ser un destino de atracción turística, porque es un lugar maravilloso». Con estas palabras comenzó su rueda de prensa una profesora de Psicobiología de la Escuela de Medicina de Harvard, Bertha Madras, que participó en la cumbre sobre drogas que se celebró en la capital de Lugo esta semana.
Como ella, muchos de los asistentes al encuentro internacional afirmaron estar sorprendidos con una ciudad que no imaginaban así y de ahí que la palabra wonderful (maravilloso en inglés) se haya pronunciado cientos de veces a lo largo de la semana. Lo mismo sirve para alabar el espectáculo de flamenco y música afro que se organizó para los visitantes en el Círculo das Artes, que para hablar de la Mosqueira, las pallozas o las Catedrais. Esta semana, todo fue wonderful y no solo para los extranjeros. Una de las ponentes que menos kilómetros hizo para estar en Lugo en la cumbre, la viguesa Carmen Avendaño, afirmó que «a ver si vengo a pasar algunos días con mi marido porque Lugo está muy cambiado y muy bonito».
Las conferencias comenzaron el miércoles y terminaron el viernes, pero muchos participantes llegaron el fin de semana pasado y tienen previsto marcharse hoy, de manera que han pasado una semana en Lugo y les ha dado tiempo a disfrutar de la capital por la noche, pero también de algunas zonas de la provincia.
Turismo
La cumbre se planificó para que el sábado pudiera dedicarse por completo al turismo y se ofrecieron varias posibilidades: una visita guiada por el casco histórico de la capital lucense, o hacer algunos tramos de distintas rutas del Camino de Santiago. La primera, de Ribadeo a Illa Pancha con el programa Km0 de la Diputación y, en la segunda, se proyectaba hacer la entrada a Galicia del Camino francés por Pedrafita.
La concejala de Benestar Social, Carmen Basadre, hizo de anfitriona de los visitantes que decidieron quedarse en la capital. Comenzaron la ruta en la Praza Maior para ir hacia la Mosqueira y caminar por el adarve hasta la Porta de Santiago. A continuación, vieron la catedral y fueron al Centro de Interpretación de la Muralla y a la Casa dos Mosaicos, todo ello con una guía del Centro de Interpretación. Aunque en un principio solo estuvieron 15 de los 25 que se habían apuntado, a medida que avanzaba la visita fueron llegando más y, a la hora de bajar al Rato, ya había una treintena de personas.
Como colofón de la visita, nada mejor que unos vinos con sus correspondientes tapas por la Rúa Nova, Praza do Campo y Bispo Basulto. Y en las conversaciones, la palabra comodín de la semana: Lugo es wonderful .