El Grumir de Ribadeo rescató a un niño de corta edad y a su madre en la playa de As Catedrais
A MARIÑA
Ayer, cuando no había comenzado todavía la jornada de los servicios de socorrismo, ya se produjo un rescate en la playa ribadense de As Catedrais. Lo hizo uno de los miembros del Grumir ribadense que se encontraban junto con otros dos compañeros limpianzo las aceras en ese momento, en las inmediaciones del emblemático arenal.
Según relataron, eran alrededor de las diez y media de la mañana y había media marea. El agua estaba subiendo y en las cercanías de la primera piedra que se encuentra al bajar las escaleras de acceso estaba jugando un niño que calculan tendría unos ocho o nueve años de edad. El chaval se metió en la poza que se forma junto a la piedra, sin darse cuenta de que cubría. Cuando la madre del pequeño se percató de lo que estaba ocurriendo se metió detrás, pero tampoco hacía pie y el agua, al hacer remolino, les arrojaba hacia fuera.
Fue entonces cuando los miembros del Grumir vieron lo que ocurría, metiéndose uno de ellos, con ropa y todo, a sacar a las dos personas que estaban en apuros.
Mencionaron que no tuvo importancia ninguna, que fue una pequeñez. A Agustín, el rescatador, le llegaba el agua hasta el pecho, señalaron, restando importancia a lo ocurrido.
Recomendaciones
La familia a la que le ocurrió este percance no era de la zona. Por ello quizás ignoran que en la zona de rocas de este arenal ribadense se suelen formar pozos de agua que aparentemente no tienen mucha altura, pero si se mete una persona de estatura baja puede cubrirle.
En general, la recomendación que se puede dar a cualquier usuario de una playa, sobre todo si no la frecuentan y por tanto no la conocen, es que estén siempre atentos por si sube la marea, para que no queden aislados, que atiendan a las recomendaciones de los socorristas, pregunten las zonas más seguras para bañarse, evitando las que se encuentran cerca de las rocas, donde suelen producirse corrientes y remolinos, y si el estado de la mar es malo, que no se metan en el agua y se fijen si hay bandera roja o amarilla.