Confiesa que actuar ante tanta gente con su orquesta es una responsabilidad
22 ago 2019 . Actualizado a las 13:33 h.Desde su paso por Operación triunfo, Mario Álvarez no se ha bajado de los escenarios.
?¿Cómo fue el primer empleo en el mundo del espectáculo?
?Mi primer contacto con los escenarios fue a los catorce años. Empecé cantando en un grupo de punk, muy entre amigos. A los diecisiete años empecé en Tekila y a tener mi primer sueldo como profesional. Estuve allí hasta el 2008 y fue un período de iniciación muy bueno.
?¿Qué fue lo que le llevó a empezar a estudiar en el conservatorio?
?Cuando decidí dejar la orquesta, tenía 23 años y veía que era un buen momento para formarme. Estuve dando clases de guitarra en el conservatorio, pero también me formé un poco como actor en la Escuela Superior de Arte Dramático de Gijón, aparte de las clases de canto con un profesor particular. Después, llegaron los castings de Operación triunfo y dije, «¿por qué no? voy a hacer algo que nunca he hecho antes». Así decidí presentarme.
?¿Cómo fue el momento de darse cuenta de que estaba dentro de la Academia?
?Inesperado totalmente, porque es muy difícil poder llegar a entrar dentro. Era la primera vez que me presentaba a un casting para un programa de televisión. Cuando me dijeron en Barcelona que era uno de los dieciocho seleccionados para entrar en la Academia, imagínate, no me lo creía.
?¿Contó en algún momento con poder ganar?
?No contaba con ello. Cuando me fui de Oviedo a Barcelona sólo pedía estar dos o tres galas. Allí, fui viviendo el día a día y semana a semana, cuando ves que tus compañeros van quedando eliminados, vas pasito a pasito platándote en las fases finales.
?¿Su paso por Operación triunfo marcó un punto de inflexión en su manera de percibir la música?
?Por supuesto, lo marcó y puedo decir que me cambió la vida. Te define como un ganador de OT, lo que de alguna forma da un cierto caché.
?¿Por qué decidió volver al mundo de las orquestas?
?En el 2015, Panorama se puso en contacto conmigo y me hizo una oferta. Yo consideraba que era la mejor orquesta de España y dije, «para adelante». Fue una decisión acertada y, da la oportunidad de actuar cada noche en una ciudad distinta, con mucha gente que nos ve y que viene a mostrarnos su cariño. Al fin y al cabo también conlleva responsabilidad, pero trabajamos para eso, para que el público se divierta.
?¿Cuál es la canción que más le gusta interpretar?
?Mi canción favorita es La Bikina. Me encantan las rancheras y la música mexicana, poder cantar La Bikina acompañado de la orquesta es un placer. Es una canción que disfruto muchísimo, pero sí es cierto que no la podemos hacer en todas las fechas.