De visita a los clásicos turísticos con opción b

Laura García del Valle
laura g. del valle REDACCIÓN / LA VOZ

AL SOL

PEPA LOSADA

¿Volver a As Catedrais o a los cañones del Sil? Acude informado y, de paso, visita otras maravillas cercanas

31 jul 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Quien ha estado en Nueva York, París o Florencia sabe que para disfrutar de los sitios más filmados del mundo hay que pagar el peaje de la espera. Así que muchos optan por descubrir las urbes más cosmopolitas del mundo desde un punto de vista menos turístico. En Galicia, la saturación de determinados puntos y la falta de previsión de muchos turistas, que no cuentan con que haya que reservar o hacer largas colas, obliga a muchos a dar marcha atrás al plan inicial y lanzarse a la aventura. Pero con un poco de organización toda visita es factible.

As Catedrais

De la playa al medievo. Conocer este monumento natural no es tan fácil. Son muchos los turistas que llegan a la comunidad ex profeso para ver esta playa. De hecho, en días puntuales llegan a pasar por este arenas hasta 3.000 personas. La única forma de visitarla hasta el 30 de septiembre es mediante una autorización gratuita que puede conseguirse en la web www.ascatedrais.xunta.gal. A 27 kilómetros de As Catedrais uno puede descubrir cosas no imaginaría, y sin aglomeraciones. En Alfoz, uno puede sentirse en uno de los siete reinos de Juego de tronos al llegar al castillo de Castro de Ouro, al que puede llegar realizando la ruta dos Castelos, que pasa por las construcciones que pertenecieron al mariscal Pardo de Cela.

PEPA LOSADA

  • Precio: gratis
  • Espera. No hay cola. Pero hay que apuntarse previamente por internet

Catedral de Santiago

SANDRA ALONSO

De las cubiertas a los jardines de Fonseca. Pasear por los tejados de la Catedral es una de las atracciones favoritas de los turistas. No es para menos. Pero también puede ser una visita tediosa si uno no es previsor. Desde la Fundación Catedral Santiago de Compostela advierten que estos meses son muchos los que se quedan sin vivir esta experiencia por no haber adquirido los tiques previamente. Una alternativa que pocos se plantean es dar una vuelta por los jardines de Fonseca. A menos de 300 metros del Obradoiro, los 2.000 metros cuadrados de parque son una opción perfecta para un paseo tranquilo, en el que se puede disfrutar de los cinco árboles biloba, de gran valor botánico. Ya en el interior del pazo de Fonseca, otro de los puntos de interés es el claustro y el salón artesonado, que acoge exposiciones temporales

ALVARO BALLESTEROS

  • Precio: 12 euros
  • Espera: Oscila entre los 5 y los 20 minutos. Para grupos es obligatoria la reserva

Torre de Hércules

EDUARDO PEREZ

Rumbo al cementerio moro. Para los coruñeses siempre será el cementerio moro, aunque ahora la nomenclatura obligue a decir La Casa das Palabras. En una ciudad donde no abunda la arquitectura islámica, llama la atención tanto la construcción como sus vistas. A escasos metros, no hay que dejar de visitar la Familia de menhires. Es una buena opción si uno ya ha visitado la Torre de Hércules o si llega sobre las doce del mediodía, momento en el que las colas pueden alcanzar los sesenta minutos. Todavía no se puede adquirir la entrada (3 euros) con antelación, pero el concello pretende implantar pronto esta modalidad.

CÉSAR QUIAN

  • Precio: 3 euros
  • Espera: Una hora, entre las 11.30 horas y las 13.30 horas

Faro Fisterra

JORGE PARRI

Mar de Fóra, alternativa al atardecer. Sus vistas son apreciadas por propios y ajenos, y nadie quiere perderse su puesta de sol. Pero ir a última hora de la tarde al faro de Fisterra puede no resultar tan atractivo. Sin embargo, hacerlo por la mañana si uno desea aparcar sin perder los nervios y no estar como sardinillas en lata. Para ahorrarse este trance, desde la oficina municipal de turismo recomiendan ir por la mañana al faro y, para ver el atardecer, acercarse a la playa Mar de Fóra, que cuenta con un mirador perfecto para disfrutar de la mejor panorámica de la zona.

Ana Garcia

  • Precio: gratis
  • Espera. No hay cola en el faro, pero sí son frecuentes los problemas para aparcar.

Ribeira sacra

Santi M. Amil

Del catamarán a los vinos. Es uno de los planes que más atrae a los turistas que visitan la Ribeira Sacra. Las rutas en catamarán ganan cada vez más adeptos, y las empresas que gestionan estas visitas por los Cañones do Sil apenas dan a basto. La atracción dura una hora y media y el precio para un adulto es de 15 euros. En Viajes Pardo, una de las compañías que gestiona estos trayectos, lo advierte: si uno no ha comprado el billete con antelación es «prácticamente imposible conseguir subir al catamarán, sobre todo en los trayectos de la mañana». No solo eso, sino que hay que ser muy previsor, pues para agosto la mayoría de excursiones están reservadas. Para aquellos que se queden sin oportunidades in extremis, una alternativa es desplazarse hasta el concello de Belesar y realizar la ruta de los Viñedos, que recorre la orilla del río Miño. Es un recorrido sencillo de 4,6 kilómetros en el que se alternan zonas de viñedos con frondosos bosques.

ARQUIVO ROI FERNÁNDEZ

  • Precio. 15 euros
  • Espera. Muy difícil hacer la ruta sin tique previo.