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La UE revisa sobre el terreno las labores de Galicia para frenar la plaga de la patata

Mario Beramendi Álvarez
mario beramendi SANTIAGO / LA VOZ

AGRICULTURA

DANIEL GAYOSO

A falta de conocer el informe final, los técnicos de Bruselas valoran positivamente el trabajo desarrollado

17 oct 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Dos inspectores, un experto en tubérculos que los asesoraba, dos intérpretes y tres personas del Ministerio de Agricultura han formado el equipo de control dirigido por la Unión Europea que ha supervisado sobre el terreno los trabajos llevados a cabo en Galicia para erradicar la polilla de la patata. Las labores de inspección se llevaron a cabo entre los días 17 y 21 de septiembre y, a falta de conocer el informe final, los técnicos de Bruselas han mostrado su satisfacción sobre el grado de control de una plaga que, por ahora, no ha afectado a las principales zonas productoras, como son Bergantiños y A Limia. Los inspectores hicieron los trabajos de control en distintas áreas perjudicadas, e incluso visitaron la planta de Cesuga, en Cerceda, que es donde se destruyen los tubérculos. También mantuvieron diversas reuniones con los portavoces de la Indicación Xeográfica Protexida (IXP) Pataca de Galicia.

Hasta el momento, el número de municipios afectados por la plaga de la polilla guatemalteca (Tecia solanivora) es de 33, después de que se detectara en Muxía. En la provincia de A Coruña, además de este concello, hay otros 14 infestados: Ferrol, Narón, Neda, Valdoviño, San Sadurniño, A Capela, Fene, Mugardos, Ares, Cabanas, Ortigueira, Mañón, As Pontes y Cariño. A esta lista hay que sumar otros 18 concellos de Lugo: O Vicedo, Viveiro, Xove, Cervo, Burela, Foz, Barreiros, Ribadeo, Trabada, Lourenzá, Mondoñedo, Alfoz, O Valadouro, Ourol, Abadín, A Pastoriza, Riotorto y A Pontenova.

Estos 33 ayuntamientos comprenden la llamada área demarcada o infestada, pero hay una segunda zona tampón establecida por Medio Rural. Se trata de todos los terrenos comprendidos en una franja de 5 kilómetros en el límite de los ayuntamientos con presencia del insecto, así como en los municipios de As Somozas, Moeche y Cerdido, al estar rodeados de concellos directamente afectados por la polilla.

El procedimiento en vigor para el control de la plaga establece medidas de erradicación en las zonas demarcadas, como la prohibición del cultivo -ordenada por el propio ministerio-, restricciones al movimiento de patata y acciones de protección de instalaciones y almacenes para evitar la transmisión de la polilla. En la zona tampón sí se puede plantar, pero se ha elaborado un registro para identificar todos los cultivos. En los concellos con presencia de la polilla, además, no se puede comercializar patata a granel y todo el producto debe llegar al consumidor final embolsado y etiquetado.

Más de mil trampas

A lo largo de la campaña del 2018, además, se han instalado en Galicia 1.170 trampas para la captura de la polilla, tanto en el campo como en almacenes, aunque la mayoría se han colocado en áreas infestadas o zonas tampón.

Hasta ahora, la Xunta ha abierto 18 expedientes sancionadores por infringir las medidas: 14 por plantaciones ilegales o por no entregar la patata recogida, tres por movimiento a granel y solo uno a un comercializador.

Las sanciones se tipificaron como graves o muy graves, con multas que fueron desde los 300 hasta los 3.000 euros.