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Lo complicado que resulta decirle a un abuelo de 90 años que abandone su casa

TANIA TABOADA LUGO / LA VOZ

AGRICULTURA

CARLOS CASTRO

Los guardias de la SIR fueron los encargados de cortar carreteras, desalojar casas y trasladar a los vecinos

17 oct 2017 . Actualizado a las 09:50 h.

Cervantes es uno de los municipios de la montaña lucense con un alto porcentaje de población envejecida. La mayoría de las casas están habitadas por oriundos de la zona que contrajeron matrimonio con personas de pueblos más o menos vecinos. Juntos, con mucho sacrificio, fueron construyendo sus casas a la vez que criaban a sus hijos. La agricultura y ganadería fue su principal método de subsistencia y hoy es más que una necesidad, un entretenimiento para tener eses productos de casa que con tanto mimo cultivan.

Pues bien, no es fácil imaginarse la tesitura siguiente: lugareños de allí de toda la vida, ahora con más de ochenta años, los esfuerzos que pasaron, sus animales que ahora son su principal entretenimiento... Tener que comunicarles, a bote pronto, que abandonen su casa porque el fuego los está cercando y corren peligro de arder. La labor es complicada porque, entre el caos y el susto de la noticia, a la gente mayor le cuesta aceptarlo. Pues este trabajo de desalojo por prevención lo tuvieron que hacer en la madrugada de ayer los miembros de la sección de intervención rápida de la Guardia Civil. Contaron también con el Seprona y alguna patrulla de Seguridad Ciudadana. Además de cortar vías y de proteger a los automovilistas al ritmo del fuego, fueron los que puerta por puerta trasladaban la peor noticia: el desalojo.

Un gimnasio habilitado para acoger a los desalojados

El concello de Becerreá dio ayer una buena muestra de solidaridad. Tras saber que vecinos de varias aldeas de Cervantes serían desalojados, el GES no esperó ni un minuto en actuar. Varios voluntarios, alguna embarazada, habilitaron el gimnasio del colegio para acoger a los afectados. Prepararon colchonetas, mantas y comida. Llegaron dos vecinos de San Martín de Cereixido, que horas más tarde se fueron.