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90 concellos en la guerra contra la velutina

maría santalla REDACCIÓN / LA VOZ

AGRICULTURA

José Manuel Casal

La avispa invasora ha sido detectada ya este año en 179 municipios y llega al interior de Lugo y Ourense

26 sep 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Apareció por primera vez en España en el 2010, y en Galicia dos años después. Desde entonces, la avispa velutina ha colonizado ya buena parte del territorio gallego. Sus nidos han aparecido ya en prácticamente todos los municipios de A Coruña y Pontevedra; en Lugo, la comarca de A Mariña fue uno de los primeros lugares en los que se detectó su presencia y hoy está completamente colonizada; desde allí, la avispa asiática ha ganado kilómetros hacia el interior; por último, en Ourense, desde el área más occidental ha comenzado a introducirse también hacia el interior de la provincia siguiendo el curso de los ríos. Esta vertiginosa expansión ha obligado a la Administración gallega a tomar medidas. En el año 2014 se puso en marcha el plan de vigilancia y control de esta especie, que hoy agrupa ya a 90 concellos colaboradores. Una cifra que va creciendo a medida que la avispa asiática gana terreno, aunque sigue siendo más baja que la de municipios en los que se ha detectado presencia de velutina, que alcanzan ya los 179 según el último mapa de incidencia hecho público por la Consellería do Medio Rural, que recoge la situación a 15 de septiembre.

Según el plan de control, una vez que se confirma la presencia de un nido se informa al ayuntamiento correspondiente siempre que figure entre esos 90 que se han sumado a la estrategia y que la Xunta denomina concellos colaboradores. En este caso es el ayuntamiento el que se encarga de coordinar la actuación.

Si la detección se produce en un concello no integrado en el plan, la alerta se traslada al grupo de emergencias supramunicipal (GES) en caso de que exista. Si no, las actuaciones corresponden a la Consellería do Medio Rural o a la de Medio Ambiente.

En lo que va de año se han retirado, según datos de la Xunta, más de 3.350 nidos. Para esta operación se emplean habitualmente pértigas, ya que los nidos suelen estar en las copas de los árboles, algunos a gran altura. La Xunta ha distribuido 44 pértigas extensibles por Galicia, y con ellas los equipos encargados de eliminar los nidos llegan hasta ellos, les inyectan insecticida y sellan su entrada con espuma de poliuretano para bloquear el avispero. Este es, por el momento, y junto al trampeo para la captura de reinas, el método que centra la estrategia gallega para frenar la expansión de la velutina, una especie que depreda otros insectos, sobre todo las abejas.

Aunque la picadura de la avispa asiática no es más peligrosa que la de la común, sí ataca cuando siente su nido amenazado, y puede hacerlo en colonias, de ahí que se recomiende especial precaución en las tareas agrícolas y forestales. Además, la producción de miel y de fruta son económicamente los sectores más perjudicados por esta especie.