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Para sulfatar también hace falta carné

X. Ramón Alvite MAZARICOS / LA VOZ

AGRICULTURA

Cualquier persona cuya actividad esté vinculada al uso de compuestos químicos debe poseer una autorización

08 ene 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Si hasta hace poco más de un mes podían comprarse libremente en los negocios comerciales agrícolas repartidos por la comarca, ahora resulta imposible adquirir ningún tipo de producto fitosanitario sin la presentación de un carné oficial que acredite haber realizado un curso de 25 horas y superado un examen oficial en la materia.

Aún siendo generalizado su uso, la normativa que se aplica a estos artículos químicos sigue siendo desconocida para la mayoría de barbanzanos.

¿Qué son los productos fitosanitarios?

Los productos fitosanitarios son preparados químicos que contienen una o varias sustancias activas y otros ingredientes, y cuyo objetivo es proteger los cultivos de organismos nocivos (insectos, gusanos, etc). También tienen esta consideración aquellas sustancias destinadas a la destrucción de las plantas o malas hierbas -herbicidas- o las que regulan o bloquean la germinación.

¿Para qué usan?

De forma principal para aumentar los rendimientos de los cultivos que se realizan, así como para asegurar la buena calidad de los alimentos.

¿Cualquiera puede utilizarlos?

Debido a su elevada toxicidad y a los posibles efectos adversos sobre las personas o el medio ambiente, su uso no es adecuado para cualquier persona, si bien hasta el momento era generalizado su empleo ya que apenas se realizaban controles al respecto. En este sentido, desde el pasado 26 de noviembre, la nueva normativa sobre estos productos prohíbe su venta a quien no disponga del carné oficial de aplicador de fitosanitarios.

¿Cómo puede obtenerse el documento?

Acudiendo a un curso de 25 horas en el que se explican nociones básicas sobre la composición de estos productos químicos o su forma correcta de aplicación, almacenaje y destrucción. Posteriormente hay que superar un examen oficial de la Conselleira do Medio Rural. La vigencia de esta autorización es por diez años.

¿Dónde y cuándo se llevan a cabo los cursos?

Hasta el momento se venían realizando a través de las oficinas agrarias comarcales. Durante los últimos meses, y debido sobre todo a la larga lista de espera que acumulaban los cursos, han aparecido consultorías que preparan a los interesados para esta prueba. Hasta el momento se desconoce el calendario oficial de cursos que, en próximas fechas, debería publicar la Xunta. En la comarca barbanzana, a raíz de la obligatoriedad de poseer los certificados se han constituido empresas privadas en las que se imparte la formación necesaria. Eso sí, el examen debe hacerse en un lugar determinado por la Administración.

¿Quién debe poseer de forma obligatoria el carné de aplicador de fitosanitarios?

Cualquier persona cuya actividad profesional esté vinculada al uso de estos compuestos químicos. La normativa en la materia establece tres niveles para el curso de capacitación: básico, cualificado y fumigador. En síntesis, el básico está dirigido a los agricultores; el cualificado a quienes vendan estos productos y el de fumigador para aquellas personas que manejen productos muy tóxicos o mortales que sean o generen gases.

En el caso de personas con una pequeña huerta, frutales, vides, ¿cómo les afecta la normativa que ha entrado en vigor y que ya es de obligado cumplimiento?

Sobre todo les limitará el tipo de productos que pueden adquirir al restringirles los destinados específicamente a uso profesional. Hay, sin embargo, un número importante de sustancias en el mercado con propiedades similares a las de los fitosanitarios tradicionales destinadas al ámbito doméstico a los que si pueden tener acceso. La normativa, sin embargo, abre la posibilidad de que agricultores no profesionales puedan utilizar fitosanitarios convencionales siempre y cuando el envase empleado no supere el litro de capacidad en el caso de aerosoles o de medio litro para el resto de productos.

La mayoría de estos artículos se aplican con medios mecánicos, ¿qué sucede con la maquinaria que se emplea?

También tiene que pasar una revisión. Una especie de ITV que está dirigida sobre todo a aquellos aperos destinados a un uso profesional. En la comarca un total de 250 máquinas deberán pasar esta revisión durante el presente ejercicio y repetirlas, dependiendo del tipo de apero, a los tres o cinco años.

¿Qué se vigilará en estas máquinas?

Fundamentalmente aspectos como el estado de las boquillas de aplicación, los tubos o mangueras, los manómetros de presión o los sistemas de medida.

¿Qué otras obligaciones deben cumplir quienes usen fitosanitarios?

Deberán registrar en un libro específico todas las aplicaciones que lleven a cabo. En estas anotaciones deberá figurar el tipo y cantidad de producto aplicado o la finca en la que esta se ha llevado a cabo. También tienen obligación de gestionar convenientemente los envases vacíos.

¿Qué se debe hacer con estos recipientes?

La normativa es muy estricta en este sentido. Incluso vacíos, los envases de fitosanitarios son potencialmente tóxicos por eso es necesario su correcta manipulación. Se ha creado una red de establecimientos denominada Sigfito que se dedican a la recogida de envases para su posterior tratamiento. En la mayoría de tiendas comerciales donde se venden también se recogen las botellas o garrafas vacías.

¿Qué están haciendo los particulares?

Muchos de ellos han acudido a las oficinas de extensión agraria más próximas a su localidad con el propósito de obtener la información necesaria para saber cuáles son los requisitos y poder cumplirlos.