Dubái, una ciudad de altura y adrenalina

Dubái es una ciudad de récords y de altura. En ella se puede pasear a ras de suelo y por sus elevadas y transparentes plataformas. Caminos que hacen de Dubái una ciudad magnética que roza las nubes

El Burj Khalifa es el edificio más alto del mundo. A lo largo de sus 828 metros de altura se suceden residencias particulares, el hotel Armani, varios restaurantes y bares (es importante reservar con antelación y recuerde que la puesta de sol es el momento del día más codiciado) y dos miradores: At The Top y At The Top Sky. El primero se encuentra en las plantas 124 y 125 y la entrada que permite disfrutar de una espectacular panorámica cuesta alrededor de 169 AED, unos 43 euros. El segundo mirador se encuentra en la planta 148, a 555 metros de altura, y el precio de la entrada es de 399 AED, alrededor de 100 euros.

Un poco más abajo, a 442 metros de altura, se encuentra uno de los locales de moda de la ciudad: The Lounge Atmosphere, el restaurante más alto del mundo. Un restaurante de primera clase con unas vistas únicas donde tomar un almuerzo ligero, picar algo a media tarde y disfrutar de una cena de primera. El menú de alta cocina incluye algunos de los mejores platos europeos y delicias como foie gras,  ostras o solomillos de wagyu. Desde algunas mesas se puede contemplar el espectáculo musical y acuático de la Fuente de Dubái, una de las grandes atracciones de la cuidad que cada día reúne a cientos de turistas. Esta fuente, enclavada en un lago artificial de 12 hectáreas junto al Dubai Mall, a los pies del Burj Khalifa, ofrece un espectáculo gratuito, a no ser que se quiera disfrutar en primera fila, en dicho caso la entrada tiene un precio de 45 AED, unos 11 euros, todos los días a partir de las 18h. Un baile de agua en el que algunos chorros alcanzan los 140 metros de altura al son de la música tan conocida como Thriller, de Michael Jackson, Time to say goodbye, de Andrea Bocelli y Sarah Brightman, o Power, de la banda de pop coreano EXO, entre otras.

AURA Skypool es la piscina infinita más alta del mundo con una panorámica de 360 grados.  Toma asiento en la planta 50 de la torre Nakheel´s Palm, a 200 metros de altura, en un oasis en el cielo con vistas a la Palmera Jumeirah, al Burj Al Arab y Ain Dubai y al resplandeciente horizonte del Golfo Pérsico. Una experiencia acuática y visual donde es posible darse un baño en el cielo.

Esta piscina infinita en alto tiene 750 m², cuenta con solárium y elegante lounge con una completa carta internacional. Se puede disfrutar en tres tramos diferentes: al amanecer (200 AED, unos 50 euros), por la mañana (250 AED, unos 62 euros) y al atardecer (275 AED, unos 70 euros). La tarifa incluye una hamaca, acceso al bar y un pack de bienvenida personalizado.

Sky Views Dubai es una atracción para los más atrevidos que se encuentra en la parte más alta del Address Sky View, un hotel compuesto por dos torres unidas por una pasarela. Un edificio doble que ofrece tres opciones para disfrutar de las vistas a 219,5 metros de altura. Por un lado, los menos atrevidos puede subir hasta el observatorio de la planta 52, al que se llega en un ascensor panorámico de cristal. En dicha planta hay unas escaleras en espiral que dan acceso a la planta 53, en la que hay un camino de cristal de 46 metros de largo hasta la torre contigua. La entrada cuesta 85 AED (21 euros) y 70 AED (17 euros), en el caso de los niños entre 4 y 17 años.

Pero los más intrépidos van a encontrar aquí toda una experiencia. Primero, desde la planta 53 pueden acceder a un tobogán de cristal con el que deslizarse hasta la planta inferior. Las vistas son increíbles, si uno se anima a deslizarse con los ojos abiertos. Si se quiere repetir la experiencia hay que abonar un extra de 25 AED, (6 euros). Pero la verdadera atracción es el paseo por la cornisa Sky Views Edge Walk: un recorrido pionero en la ciudad, que se hace provisto de casco y sujeto a un arnés de seguridad, aunque con las manos al aire,  que transcurre por la repisa que rodea la parte superior de la cápsula principal de la torre, a más de 219,5 metros de altura. Un recorrido de altura (literalmente) por el exterior del edificio sin barreras protectoras de por medio entre uno mismo y las vistas. Este paseo por las nubes de Dubái cuesta 504 AED (126 euros).

Con sus 150 metros de alto, sus 93 metros de ancho y un puente que conecta ambas torres, Dubai Frame, también conocido como el marco de Dubái, es una de las principales atracciones turísticas de la ciudad y una de las más llamativas. Ubicado en Zabeel Park, este grandioso marco ofrece unas espectaculares vistas que explican a la perfección el desarrollo de Dubái: hacia el norte se puede contemplar el distrito histórico y hacia el sur, un increíble panorama del moderno paisaje urbano de la ciudad.

La experiencia se completa paseando por Sky Deck, el puente de cristal de 50 metros de largo que es un espectáculo en sí mismo. Está fabricado con cristal líquido y tiene una capa inferior que, gracias a sensores, se activa y vuelve transparente cuando los visitantes caminan sobre el puente para ofrecerles también una vista vertical de la ciudad, mientras se experimenta la sensación de caminar por el aire. Además, para ahondar en el viaje histórico que ofrece esta atracción, además de las vistas, se puede conocer el pasado, presente y futuro de la ciudad a través de animaciones y efectos holográficos con música tradicional y fragancias que nos transportan a otras épocas. Y la Future Zone es un túnel envolvente que imagina cómo será el Dubái de dentro de medio siglo con taxis voladores, ciudades submarinas o misiones espaciales (la entrada cuesta 50 AED, 13 euros, para adultos y 20 AED para niños, 5 euros. Los menores de tres años no pagan).