Loida, la heroína en silla de ruedas que levanta el doble de su peso
La levantadora extremeña, premio Iberdrola SuperA Inclusión, fue la primera mujer en representar a España en halterofilia en unos juegos paralímpicos
No se considera una víctima. Es una persona alegre. Le gusta escuchar música y los videojuegos. Una deportista enérgica. Pero por encima de todo, Loida Zabala es un ejemplo de superación personal. Y si alguien, hace ocho años, le hubiera dicho que iba a poder elevar el doble de su peso le habría respondido que era imposible. La levantadora extremeña de halterofilia pesa solo 48 kilogramos pero puede levantar 100. Y todo su esfuerzo se ha traducido en grandes triunfos deportivos y varios galardones como el premio Iberdrola SuperA Inclusión, que considera “uno de los mayores logros” que ha conseguido en su vida.
Este año, además, ha sido especial para ella. En la categoría de hasta 50 kilogramos, obtuvo la medalla de plata en la Copa del Mundo de halterofilia paralímpica en Manchester (Inglaterra) y ha dado un paso importante para su clasificación a los Juegos de Tokio que se celebrarán en 2021 tras suspenderse en 2020. A pesar de los efectos de la pandemia, Zabala ha podido mantener su nivel. “Nuestro entrenamiento estaba enfocado para competir este año, pero obviamente ha tenido que cambiar. Me he ido a Extremadura para poder seguir el entrenamiento. Al principio iba bien, pero el rendimiento se ha notado mucho, pero hemos recuperado ese pico de forma”, manifiesta la deportista, quien sueña con participar en sus cuartos Juegos si las circunstancias lo permiten.
Además, esta temporada ha revalidado el título de campeona de España en Madrid. En su primer intento logró levantar 95 kilos, un registro que no pudo superar posteriormente pese a intentar llegar a los 100, el objetivo que tenía marcado. Para culminar el curso, ha recibido el premio Iberdrola SuperA Inclusión, lo que le ha permitido cumplir otro sueño: crear una asociación que lleva su nombre para ayudar a personas con habilidades especiales.
Desde los 11 años en silla de ruedas
Zabala es una de las mejores deportistas españolas pero, además, un ejemplo de vida. A los 11 años, sus piernas dejaron de caminar como consecuencia de una mielitis transversa. Esa enfermedad no le impidió sacar la energía necesaria para alcanzar sus sueños. “Como me pilló a los 11 años lo pillé con total normalidad. Cuando pasas mucho tiempo en una cama, en el momento en el que te sientas por primera vez en una silla de ruedas lo sientes con libertad”, señala.
De hecho, confiesa que siempre se ha sentido una persona normal, aunque reconoce ser una inspiración para mucha gente. “Se han acercado personas en conferencias diciéndome que he sido un ejemplo para ellos; lo veo de una manera distinta. Me siento una persona normal que ha hecho siempre lo que me ha apasionado. Me siento afortunada de poder ayudar a otras personas. Y te demuestra que la discapacidad puede existir o no, pero depende de la actitud que tenga cada cual”, apunta.
Capítulo de la serie Invencibles, creada por Iberdrola
Su primer deporte fue el karate cuando era muy pequeña, pero desde siempre le han apasionado otros deportes que practicaba. No fue hasta 2005 cuando, casi por casualidad, entró en el mundillo de la halterofilia. Deporte al que se ha enganchado y que le ha permitido ser 15 veces Campeona de España, así como participar en los Juegos Olímpicos de Pekín 2008, Londres 2012 y Río de Janeiro 2016, donde ha conseguido 3 diplomas paralímpicos.
Al margen del deporte, esta extremeña de 33 años ha puesto en marcha un proyecto para montar una sala de entrenamiento en el Hospital Nacional de Parapléjicos de Toledo, centro nacional de referencia de rehabilitación integral. El objetivo es entrenar a los pacientes con lesión medular y diferentes discapacidades motrices para encontrar una motivación que le ayude en su vida. “A pesar de sufrir una discapacidad no tiene que cambiar a peor y puede volcar su vida en el deporte y conseguir cosas grandes”, manifiesta.
Ser actriz para normalizar la discapacidad
“El deporte me ha aportado evolucionar como persona y he tenido mucha experiencia de vida que me han enseñado muchas cosas. Como por ejemplo, antes de llegar a mis segundos Juegos me demostró la importancia de poner el foco en lo que quieres conseguir. Me ha permitido evolucionar mucho como persona”. Ahora, esta alegre cacereña estudia Interpretación. Aunque su gran sueño va incluso más allá: demostrar que una persona en silla puede desempeñar un papel como cualquier otra a pie. “A través del cine y la televisión se puede demostrar que una persona con silla de ruedas puede convivir con el resto de sociedad y no hay ningún tipo de impedimento. Es una herramienta muy útil para demostrar que una persona en silla de ruedas puede hacer lo mismo. Y, sobre todo, llegar a los niños”, recalca.
Como Zabala, en España hay otros muchos deportistas paralímpicos que demuestran cada día que con mucha dedicación pueden competir (y ganar) torneos internacionales. Como los ciclistas Adolfo Bellido y Noel Martín, así como Toni Ponce, el primer paralímpico español que se ha asegurado su pasaporte para Tokio 2021, o Sara Revuelta, capitana de la Selección Nacional de baloncesto en silla de ruedas que ha superado una leucemia Todos ellos son algunos nombres que protagonizan una serie de personas Invencibles creado por Iberdrola. La entidad apoya el deporte paralímpico a través del Plan de Apoyo al Deporte Objetivo Paralímpico (ADOP). Este programa de becas ha contribuido a la excelencia de los deportistas paralímpicos desde 2005.