Claves para exportar de manera segura
Más y más empresas abren su actividad a nuevos mercados y clientes. Los seguros de crédito son una ayuda esencial para dar el paso

El panorama económico mundial actual es incierto. Las primeras turbulencias de una posible desaceleración ya se han dejado notar. Países como Alemania o Reino Unido han pasado de registrar contracciones del 0,2% en su producto interior bruto en el segundo trimestre de 2019 a tímidas recuperaciones en el tercero, según datos de la OCDE.
Estos datos dibujan un escenario marcado por la desaceleración y la incertidumbre, en el que se mueven empresas de todo el mundo. Los análisis de Solunion, compañía de seguros de crédito y de caución y servicios asociados a la gestión del riesgo comercial, apuntan que, entre 2019 y 2020, la economía mundial experimentará un crecimiento plano e inferior al registrado en los últimos años.
Por un lado, los responsables de las políticas económicas ayudarán a evitar una nueva recesión global, sobre todo por la acción de los bancos centrales y los nuevos impulsos fiscales en Estados Unidos, China y Unión Europea. Sin embargo, se espera que los mercados sean más volátiles.
Los precios de los productos básicos también serán volubles, así como las monedas, que experimentarán una depreciación promedio de entre el 3% y el 5%, y los flujos de capital para los mercado emergentes. A efectos de las empresas, estos factores significarán un aumento de las insolvencias en torno al 8% en 2019 y 2020, según datos de Euler Hermes, uno de los accionistas de Solunion.
Crecer en terreno movedizo
La coyuntura macroeconómica aconseja a las empresas buscar vías que les ayuden a diversificar sus riesgos y la exportación es una de ellas.
Ampliar la actividad de la empresa hacia el exterior supone acceder a nuevos mercados y clientes potenciales, al tiempo que se reduce la exposición a ciertas situaciones económicas adversas. Por ejemplo, a las desventajas de mercados saturados y altamente competitivos o a la elevada dependencia del comportamiento de la economía local, así como de un número limitado de clientes importantes.
El aumento de las insolvencias en las empresas crecerá en torno al 8% entre 2019 y 2020
La exportación atrae cada vez a más empresas sin importar su tamaño, tal y como explica Laurent Treilhes, director general de Solunion en España. “En realidad, la exportación es una opción para todo tipo de empresas, tanto pymes como negocios más grandes. En los últimos años, cada vez es mayor el número de compañías que ha tomado la decisión de ampliar su negocio en otros países”, indica.
Eso sí, esta actividad no está exenta de riesgos. “Estas empresas buscan una nueva vía de crecimiento y diversificación de mercados. Si bien la exportación les ofrece importantes perspectivas de crecimiento, también entraña riesgos que hay que afrontar con conocimiento y seguridad”, añade el directivo.

Los riesgos asociados a la exportación
Entre los riesgos de la actividad exportadora de las empresas destacan los causados por la falta de conocimiento de los nuevos mercados, que expone a las compañías a posibles facturas pendientes.
La posibilidad de impago es real y puede provocar un déficit de tesorería a las empresas que se debe cubrir mediante fuentes de financiación alternativas. Si no se ha contemplado este riesgo al planificar, ese agujero en la tesorería deberá cubrirse de manera inmediata y, normalmente, a un coste muy elevado. Un supuesto que, en el peor de los casos, puede incluso llevar al cierre del negocio.
Resulta esencial contar con herramientas que ayuden, por un lado, a conocer mejor el nuevo mercado y, por otro, a minimizar riesgos como el de impago
“Es muy importante contar con información sobre el mercado en el que se va a desarrollar la actividad comercial. En este sentido, para mitigar posibles consecuencias adversas, el primer paso consiste en identificar los posibles riesgos asociados al mercado al que nos vamos a dirigir y al cliente que se ubica en él. La situación de cada país es muy heterogénea y conocer la realidad del terreno donde vamos a operar es crucial”, explica Laurent Treilhes.
“El exportador debe tener en cuenta riesgos financieros (tipos de interés y cambiarios, por ejemplo), riesgos de naturaleza técnica y de calidad, riesgos derivados de la diversidad de mercados, jurídicos, de transporte de mercancías… y, por supuesto, el riesgo de impago. Contar con un respaldo en este sentido y proteger las ventas a crédito, en caso de que el impago llegue a producirse, es fundamental para evitar situaciones muy complicadas”, añade.
Ante este panorama, resulta esencial contar con herramientas que ayuden, por un lado, a conocer mejor el nuevo mercado y, por otro, a minimizar riesgos como el de impago. Los seguros de crédito son la más eficaz.
Las ventajas de jugar sobre seguro
Los seguros de crédito cubren los impagos y proporcionan a las empresas información para minimizar los riesgos de la exportación
La contratación de un seguro de crédito no solo supone la cobertura de los posible impagos, que en el caso de Solunion se realiza a través del recobro o la indemnización. Además, supone el acceso a información importante que ayuda a minimizar la exposición de la empresa y le aporta tranquilidad.
En este sentido, los seguros de crédito ayudan a la prospección de mercados, así como a identificar a los socios más fiables hacia los que dirigir las ventas. Una labor que resulta complicada para las empresas, especialmente en el caso de las pymes. La gestión previa del riesgo que aportan los seguros de crédito de Solunion como la póliza PY sirve para orientar a estas empresas a la hora de exportar con mayor seguridad. Saber dónde y con quién deberían operar les proporciona una gran confianza.
Esta información que la aseguradora ofrece a las empresas incluye posibles cambios en la calidad crediticia de sus clientes, así como orientación a la hora de tomar decisiones estratégicas de exportación.
“El seguro de crédito es una herramienta fundamental para desarrollar cualquier actividad comercial de forma segura, tanto en el mercado doméstico como en el internacional, en una situación económica cada vez más complicada e incierta”, finaliza Laurent Treilhes. “Este producto ofrece protección y seguridad para establecer relaciones comerciales con la garantía de que, en caso de impago, el negocio estará protegido. Yo diría que es el seguro más completo para proteger los ingresos de una compañía frente a un riesgo que pone en peligro su propia supervivencia”.
Solunion, un socio comercial con capacidad de recobro en más de 30 países
Solunion es una joint venture de seguros de crédito y de caución, así como de servicios de gestión del riesgo comercial. Participada a partes iguales por Mapfre y Euler Hermes, ofrece sus productos y servicios a compañías de España y Latinoamérica. Cuenta con una red internacional de vigilancia de riesgos, desde la que analiza la estabilidad financiera de más de 40 millones de empresas, así como de países y sectores de actividad, para responder a las necesidades de sus más de 6.000 asegurados en todo el mundo.
Dentro de su oferta se encuentran productos y servicios de seguro de crédito, caución, recobro y otras soluciones de gestión del riesgo comercial a compañías de cualquier tamaño y sector. También provee a sus clientes de información comercial, realiza prospección de mercados y gestiona tanto el recobro como la indemnización.