La Voz de Galicia

Clases para echar el estrés del aula

Vigo ciudad

maría jesús fuente vigo / la voz

El colegio Mosteiro (Bembrive) implanta una experiencia innovadora de «mindfulness»

27 Sep 2018. Actualizado a las 13:37 h.

Es uno de los centros de enseñanza más innovadores de Galicia y lo ha vuelto a demostrar. El colegio público Mosteiro de Bembrive ha implantado este curso la práctica de mindfulness, o lo que es igual, de la atención plena. «Vemos que los niños tienen falta de atención, que están sobreestimulados y les cuesta centrarse. Se trata de reducir el estrés y de introducir la calma para corregir esa vida agitada que a veces se tiene en las familias. Es muy beneficioso para el niño», indica la directora del centro de educación infantil y primaria, Isabel Alvar.

Igual que otras actividades como la lectura, el programa se desarrolla a diario durante diez o quince minutos al regreso del recreo. A mayores, los docentes pueden aplicar la atención plena en un momento puntual, aunque sean tres minutos, si consideran que los escolares están muy estresados.

Para poner en práctica este programa los docentes se formaron el pasado curso con el experto Stuart McNicholls, profesor de la Facultad de Ciencias de la Educación de la Universidad de Vigo.

«Hicimos un proyecto sobre el tema y aplicamos las prácticas con los niños. Ellos mismos te lo piden y al terminar se sienten bien, su respuesta es muy buena, aumenta la concentración, la cohesión del grupo, la creatividad...», comenta la directora. Tiene claro que la educación debe de dar un giro para centrarse más en lo emocional, lo que, dice, sin duda mejoraría no solo en el aspecto personal, sino también a la hora de aprender y de tener más éxito. Reconoce que la jornada escolar es intensa, a la que se suman las actividades extraescolares. Entre estas también incluyen inteligencia emocional, una opción muy ligada al mindfulness y ofrecida cada vez por más centros escolares.

El material empleado en la atención plena no supone un gran coste. «Necesitamos algún instrumento adecuado para emitir un sonido y que se den cuenta de que empezamos a hacer una práctica. Por ejemplo, les decimos: ‘Vamos a hacer un escaneo corporal’, entonces utilizamos un sonido como el de los cuencos. Sirve un triángulo, un cuenco tibetano.... Se pueden utilizar cojines o el mismo suelo si es de madera. Puede hacerse de pie, sentado...», añade Alvar. La idea es convertirlo en una rutina diaria para que conozcan bien esta herramienta y sean capaces de aplicarla en casa, en su vida diaria.

Con 238 alumnos de entre 3 y 11 años, el colegio Mosteiro ha sido pionero en otros ámbitos como la regulación de los deberes. Los profesores los escriben en la pizarra para coordinarse y no cargar de trabajo un mismo día a los alumnos. También fue pionero hace tres décadas en la creación de un banco de libros. Este curso celebrará su medio siglo.

«Ahora todo es más rápido y nosotros somos los mismos humanos»

Stuart McNicholls, experto en mindfulness y profesor de la Facultad de Ciencias de la Educación de la Universidad de Vigo (campus de Ourense), destaca que hay un interés creciente del profesorado por estos cursos para aplicarlos en las aulas. «Son herramientas para gestionar mejor la interioridad. Hay cursos, exámenes, productividad, mucho estrés. Es un mundo frenético. Con las nuevas tecnologías hay muchos puentes que se abren y más exigencias. Todo se hace más rápido y nosotros somos los mismos humanos. Hay como un descoloque entre lo que viene del exterior y nuestra capacidad para llevarlo a cabo», apunta. La atención plena, dice, no solo beneficia a la parte académica, sino también a la socioafectiva, a llevarse bien con los compañeros, a hacer exámenes, a tocar un instrumento. «Cuanto antes se empiece a practicar, mejor. La educación no es solo meter contenidos cognitivos, sino hacer personas más felices», concluye el profesor.


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