La Virgen del Carmen, sumergida para siempre en la ría de Ribadeo

La ría de Ribadeo, conocida por la cantidad de pecios hundidos en ella, tiene desde el año 2014 otro lugar de peregrinación para los aficionados al submarinismo. Está en las inmediaciones del antiguo cargadero de mineral (ahora complejo etnográfico), junto a un yate hundido. Allí, a unos nueve metros de profundidad, miembros del club de actividades subacuáticas Illa Pancha sumergieron una imagen de la Virgen del Carmen tallada en un bloque de granito, con unas medidas de 83x53 centímetros y un peso de 56 kilos. Desde aquel 2014, con el paso de los años la estatua se fue deteriorado, por efecto de los corales, algas y mareas, al extremo de que la cara de la Virgen llegó a estar totalmente desfigurada y más bien parecía un panal de abejas.

Por eso hace unas semanas fue recuperada, para restaurarla. El pasado domingo, coincidiendo con la festividad del Carmen y la procesión marítima por la ría, miembros del club Illa Pancha volvieron a sumergirla, tras aplicar a la figura un tratamiento específico para que se conserve en mejor estado.

En el operativo participaron una decenas de buceadores de varios clubes. Fue la primera fase. La imagen de la Virgen fue depositada en el fondo de la ría y dentro de unos días, cuando las condiciones del mar mejoren, será llevaba a la proa del yate hundido, donde quedará para siempre. Esa es la idea, tal y como explicó José María Sanjurjo, presidente del club Illa Pancha: «Co tratamento que lle demos garanten que estará ben cinco años, pero penso que xa quedará alí sempre, como punto de peregrinación dos submarinistas».

La idea de fondear la imagen de la Virgen fue cuajando poco a poco. Hace años, miembros del club sumergieron una pequeña talla, hecha en resina. Como el mar la movía, adquirieron otra a la que pusieron una base de mármol. Tampoco sirvió. Entonces optaron por comprar una de granito, a un fabricante de Murcia. Cuando venía camino de Ribadeo, en el transporte sufrió un golpe y rompió un fragmento. Tuvieron que pedir otra, que finalmente fue la que se fondeó y que ahora ha sido restaurada. Lejos de quedarse ahí, desde el club avanzan que están pensando en comprar otra, de mayor tamaño.

«Cando fas unha inmersión en Ribadeo é raro que non pases por alí, porque é unha zona con bastante material arqueolóxico xa que era onde fondeaban os barcos e ao longo dos séculos caeron moitas pezas. Pasas e ves a Virxe. Sabes que está alí. É bonito, ben bonito», concluyó Sanjurjo Peña.