La Voz de Galicia

El negocio del surf crece este verano

Ferrol ciudad

beatriz antón ferrol / la voz

La llegada de aficionados a las playas de la comarca no para de crecer y el alumnado de las escuelas se ha incrementado en un 10% con respecto a la pasada temporada

21 Jun 2019. Actualizado a las 12:59 h.

«Hace cinco o seis años, a la playa de Esteiro de Mañón solo íbamos unos pocos surfistas locales, pero ahora la situación es bien distinta y casi ni puedes aparcar el coche, porque está todo lleno de furgonetas de austríacos y alemanes». Lo cuenta Pablo Maciñeira, responsable de Ortegal Surf Escola -la única escuela de la displina con sede en la comarca del Ortegal-, quien asegura que la llegada de turistas que desembarcan en la comarca atraídos por sus fabulosas playas «es algo que va a más y sin duda seguirá yendo a más en el futuro».

La mismo opinan otros muchos directivos y monitores de las escuelas de la zona, que este verano no solo perciben a un mayor número de «turistas surfistas» cabalgando sobre las olas de la llamada Costa das Ondas -la marca con la que la Mancomunidad promociona el turismo de surf en Ferrolterra y Ortegal-, sino que también han notado un aumento en la demanda de cursillos para iniciarse en la práctica de la disciplina. A falta de que la temporada llegue a su fin, Jacobo Suárez, responsable de la consultoría de turismo deportivo Goodlife, apunta que en lo va de verano la matrícula en las escuelas de surf de la comarca ha crecido al menos un 10% con repecto al mismo período del año pasado.

«A pesar de que el turismo ha bajado ligeramente este mes de julio en toda la comarca, el sector del surf no lo ha notado e incluso ha crecido. Eso demuestra que el posicionamiento de Ferrolterra como destino de surf está consolidando y va a ir a más», señala el responsable Goodlife Consultores.

 

¿Una moda pasajera?

La opinión de Jacobo Suárez la confirman con cifras algunos de los responsables de las escuelas de la comarca. Iván Manso, de Valdo Surf -una escuela con sede en Valdoviño y que desde hace un año opera también en Doniños- recuerda que hace cinco años, cuando puso en marcha el negocio, apenas contaba con quince alumnos en verano, cuando en este mes de julio atiende a una media de 150 personas a diario (130 en Valdoviño y 40 en Ferrol).

Luis Rodríguez, que comanda la escuela que lleva su nombre en Doniños, también da fe de ese bum. Explica satisfecho que en este mes de julio ha cumplido sus «objetivos» y asegura que el surf no es una «moda pasajera, sino que ha llegado para quedarse». «No sé cómo será en otros municipios, pero en Ferrol hay mercado para todos porque hay mucha demanda», comenta Rodríguez.

Juan Piñeiro, que dirige la escuela Ferrol Surf School y el alojamiento Surf&Yoga House, también ha notado un incremento de alumnos en este mes de julio, aunque advierte que no tanto como en otros centros de mayor envergadura. «Somos una escuela humilde y no tenemos capacidad para atender a tantos alumnos. Además, pienso que es bueno que el sector crezca, pero hay que hacerlo con cabeza. Si todas las escuelas vamos con sesenta alumnos cada día a la playa, la zona terminaría por perder su encanto».


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