Utilitario, ágil y deportivo

El Corsa GSi es todo un clásico en el mercado español, aunque en los últimos tiempos el modelo se ha visto superado por la competencia que ha sacado modelos más modernos. Para recuperar espacio nada mejor que poner toda la carne en el asador, a nivel de motor, chasis y equipamiento, aderezado además con una estética inconfundiblemente deportiva con alerón posterior incluido y asientos de carreras en su interior.

La primera muestra de poderío está en su motor que es el 1.4 litros Turbo de 150 caballos, que brilla todavía más gracias a una caja de cambios manual de desarrollos muy cortos. Su aceleración de 0 a 100 km/h se sitúa en 8,9 segundos y su velocidad máxima es de 207 km/h. En este estatus de utilitario deportivo sus rivales serán el Ford Fiesta ST y el Seat Ibiza 1.5 TSI, aunque en el caso del Opel esta versión GSi solo se ofrece con tres puertas, mientras que la mayoría de los fabricantes han abandonado esta opción de carrocería.

A las prestaciones de su motor hay que unir las bondades de un chasis OPC testado en el famoso trazado del Nordschleife de Nürburgring, donde rodó con las llantas de 18 pulgadas opcionales con neumáticos deportivos.

La verdad es que para los amantes de los coches pintones el Corsa GSi es un caramelito, con grandes entradas de aire, incluida una en la propia tapa del motor, parrilla en nido de abeja, un prominente spoiler trasero y taloneras laterales. Se han cuidado detalles como las pinzas de freno pintadas en rojo o la salida de escape cromada. En el interior encontramos, de forma opcional, un asiento Recaro réplica de los baquets de competición, además del pomo de la palanca de cambios de cuero y un pedalier de aluminio.

Las versiones GSi del Opel Corsa datan de 1988, donde ya desarrollaba 100 caballos de potencia. El Corsa GSi ya está disponible en la red de concesionarios de la marca, dispuesto a curvear, que es como mejor se manifiesta.