La Voz de Galicia

Los barrios se suman al ejemplo de la Ciudad Vieja contra las pintadas

A Coruña ciudad

E. Eiroa A Coruña / la voz

Residentes del casco histórico volverán a limpiar sus muros ante la inacción municipal

01 Oct 2018. Actualizado a las 12:54 h.

La Federación de Asociaciones de Vecinos de A Coruña celebró ayer la salida a la calle de residentes de la Ciudad Vieja para limpiar las pintadas que ensucian sus paredes. Lo hicieron por la inacción municipal ante ese problema, ya que el Ayuntamiento apenas borra grafitis de las paredes y cuando lo hace, combate el problema casi exclusivamente de modo selectivo, eliminando de los muros solo aquellos mensajes que atacan a la Marea.

«Me parece formidable lo que hicieron», dijo Luisa Varela, presidenta de las asociaciones vecinales, sobre las acciones llevadas a cabo en la Ciudad Vieja. Varela afirma que es cosa del gobierno local atajar el problema, y recuerda en el entorno de las escalinatas de Santa Lucía también hay residentes que han optado por limpiar ellos mismos ya que el consistorio no lo hace. «Puede que las asociaciones hagan algo similar, es de agradecer que lo hicieran en la Ciudad Vieja», dice, y espera que el ejemplo «enganche» a otros colectivos de la ciudad.

«Que gasten algo del presupuesto y sobre todo que vigilen, este problema se junta con la suciedad y estamos dando una imagen para el turismo lamentable», dijo ayer la presidenta vecinal reclamando mayor implicación vecinal con el problema y pidiendo al gobierno local «que tome nota» de lo acontecido el viernes en el casco histórico.

El mismo día, antes de la acción vecinal, el alcalde aseguró que el problema no era nuevo y que tratarán de cambiar la ordenanza para facilitar que se limpien muros privados, lo que hoy es difícil. Sin embargo, el Ayuntamiento sí retiró en las últimas semanas alguna pintada de muros privados, solo las que atacaban a la Marea, dejando en el lugar el resto.

«Vamos a seguir, no sé si esta semana o la siguiente, pero volveremos con más rodillos y más pintura», decía ayer Diana Cabanas, una de las participantes en la acción del casco histórico. «Esto se puede extender a otros barrios, puede tener repercusión en toda la ciudad», dijo, y explicó que piden apoyo y colaboración de voluntarios: «Si alguien puede colaborar con alguna aportación, fantástico, pero no se lo vamos a pedir a nadie».

La vecina explica que el desencadenante de la actuación «fue el borrado selectivo», recordando que hay pintadas muy molestas por toda la ciudad y asegurando «que no tiene sentido que se limpien unas y otras no: ya que estás, limpia todas».

El gobierno local, que ayer rehusó dar más explicaciones tras la movilización vecinal, también trabaja en el nuevo contrato de basuras con una brigada específica para ese problema, si bien los pliegos exigen menos personal para ese fin del que hay actualmente.

El PP preguntará en el pleno por qué el gobierno prioriza eliminar mensajes contra la Marea

El PP preguntará en el pleno de mañana por qué el gobierno local ha dado orden de priorizar la limpieza contra su propio partido en lugar de hacerse cargo del borrado de todas. Para los populares, la actuación de los vecinos de la Ciudad Viejas es «la muestra del hartazgo de los coruñeses ante la dejadez de este gobierno municipal frente a un problema creciente».

Los socialistas aplaudieron la acción vecinal y recordaron que allí estuvo, apoyando, la edila Pilar Neira. «Hay una evidencia clamorosa, la ciudad está llena de pintadas, descuidada, adolece de falta de mantenimiento generalizado», indican desde la formación. El PSOE recuerda que el contrato de la limpieza venció en enero y está prorrogado. «Parece que la concejalía no es capaz de planificar una acción eficaz, aumentando la vigilancia, mejorando la limpieza y sancionando a los infractores», señalan.

El BNG también aludió a la «aplicación arbitraria» de la ordenanza de limpieza y las sanciones en función de «quen sexa quen intervén no espazo público». La proliferación de pintadas «non é só» cuestión de normativas, señala el Bloque, que incide en que la ciudad carece de muros reservados para el arte urbano y el grafiti. Los nacionalistas dicen entender «o enfado da veciñanza da Cidade Vella e que saíra á rúa», pero insisten en que con espacios habilitados las pintadas desaparecerían en grande medida.

El alcalde, Xulio Ferreiro, indicó el jueves que en sus planes no estaba aumentar la cuantía de las multas a los grafiteros, algo que la Federación de Asociaciones de Vecinos le parece «fatal».


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