Aportando un enfoque integral a la psiquiatría

Dar una solución global al paciente, que incluya, además del tratamiento farmacológico, herramientas para que logren un mayor grado de autonomía y puedan normalizar su vida diaria. Este es el objetivo principal del sanatorio psiquiátrico La Robleda, que desde el año 2007 cuenta con unas completas y modernas instalaciones en el Concello de O Pino. 

El centro, que cuenta casi con un centenar de camas y un equipo de más de cincuenta profesionales aborda todas las patologías de salud mental con un  enfoque multidisciplinar . Alberto de la Cruz, uno de sus psiquiatras, explica que tratan todo tipo de enfermedades mentales, tanto crónicas como agudas. Esto hace que el perfil de los usuarios sea variado. Desde crónicos, generalmente, con trastornos afectivos o psicóticos resistentes,hasta problemas agudos, como psicosis o adicciones, pero para todos ellos se diseñan terapias integrales que huyen del viejo modelo de enfermos aislados y medicados. " El paciente agudo precisa principalmente una intervención farmacológica, y normalmente se suele asociar un trabajo psicológico. En el caso de los crónicos buscamos una estimulación a nivel conductual, y de ahí la importancia de la terapia ocupacional", explica de la Cruz. 

La Robleda incluye en sus instalaciones talleres de lectura, cine, manualidades, pintura,programas de radios, excursiones al exterior, baile o gimnasio. Todo protocolizado y acordado por un equipo de profesionales que incluye psiquiatras, psicólogos, enfermeros, terapeutas ocupacionales, auxiliares de enfermería, monitores e incluso nutricionistas. " Prácticamente a todos los pacientes se les recomienda acudir al gimnasio y realizar actividad física", explica Alberto de la Cruz . " Tenemos que dar al paciente psiquiátrico normalidad y calidad de vida". Y estas terapias que acompañan a los fármacos son "primordiales" ya que en los procesos afectivos o psicóticos se produce un empobrecimiento cognitivo en el que el paciente tiende a la abulia, a la apatía y a una escasa reactividad emocional " buscamos motivarlos y tratar de llevarlos a la normalidad" , insiste el facultativo. 

Desde hace un tiempo cuentan con una serie de habitaciones con mayor privacidad, para un determinado tipo de pacientes que requieren más tranquilidad o aislamiento en relación a otros cuadros. 

Dentro del trabajo para buscar más calidad de vida La Robleda trabaja ya en un nuevo proyecto, un jardín terapéutico. Actualmente el sanatorio ya tiene zonas verdes, pero su objetivo es lograr que sirvan como una herramienta más de atención al enfermo. Porque los pacientes de salud mental pueden permanecer en media y larga distancia en estos centros, aunque las estancias son heterogéneas en función de la patología. Un crónico puede estar años, mientras que un enfermo agudo puede irse de alta en un mes. 

Si en cualquier patología es importante la continuidad asistencial,cómo no va a serlo en psiquiatría. De ahí las consultas ambulatorias, si el paciente lo desea. La importancia de mejorar la calidad de la atención se refleja en otra realidad, aunque son casos muy esporádicos, si el enfermo ingresa en el centro pero quiere que su profesional de referencia le haga un seguimiento, el sanatorio no pone obstáculos a que venga a visitarlo al centro. 

Además de la continuidad las personas con una enfermedad mental también necesitan ser atendidas por un equipo integral, " todas las mañanas hacemos una reunión, y los jueves tenemos un encuentro con todo el personal para evaluar las historias " , explica de la Cruz. Porque el trabajo de los psiquiatras y los psicólogos es importante, pero no lo es menos el de los monitores,terapeutas, enfermeros o auxiliares. " Ellos son los que pasan más tiempo con los pacientes -explica Alberto- los conocen y de ahí que haya que realzar mucho su papel"

Adicciones

Además de trastornos afectivos o psicóticos, como esquizofrenia o bipolaridad, actualmente los centros de psiquiatría reciben a un importante número de pacientes por consumo de sustancias, bien para tratar sus adicciones o bien porque han sufrido un proceso psicótico derivado de este consumo. El alcohol sigue siendo una constante, mientras que entre el resto de drogas el cannabis y la cocaína provocan la mayoría de los trastornos psiquiátricos. 

Normalidad 

Los enfermos de psiquiatría han sido considerados históricamente como pacientes de segunda. Se habla todos los días del cáncer en los medios de comunicación, pero no de una serie de enfermedades que probablemente sean más incapacitantes. De ahí que los profesionales de la psiquiatría insistan en dotar de normalidad a estas patologías y a sus pacientes, y en poner encima de la mesa los problemas de salud mental . " Si uno no se encuentra bien a nivel mental, el resto es secundario, y muchas veces estas patologías han estado asociadas a un estigma negativo", indica Alberto de la Cruz. Romper este estigma, ofrecer terapias integrales y buscar la mayor normalidad posible en estos enfermos es el objetivo de la psiquiatría.