El incendio registrado en A Paradanta es uno de los mayores del verano en el área de Vigo
15 oct 2011 . Actualizado a las 06:00 h.Desde el año 2009 no se habían visto llamas tan voraces en Arbo. El incendio que se extendió a lo largo de la noche del miércoles procedente del concello vecino de Crecente se saldó ayer con más de 120 hectáreas quemadas, 20 arboladas y 100 rasas. La superficie calcinada es similar a la que se registró en A Cañiza a comienzos de la semana, con lo que la comarca de A Paradanta se ha convertido en la zona de influencia de Vigo con peores resultados este verano.
En la mañana de ayer Medio Rural daba el incidente por controlado tras 24 horas de trabajo por parte de los efectivos que trabajan en las labores de extinción: 2 técnicos, 4 agentes forestales, 18 brigadas, 7 motobombas, 2 palas, 2 helicópteros y 6 aviones. Pese a que ya se daba por zanjado, la zona de Sande sufrió un rebrote sobre las 14.00 horas que fue atajado por el personal de emergencias allí desplegado. «Habíamos tenido algún fuego este verano, pero sin importancia y fáciles de controlar. Como este se inició de noche, fue mucho más difícil de extinguir», recordó el teniente de alcalde, Luis Rodríguez. De hecho, la situación se volvió peligrosa durante la madrugada del jueves por la cercanía del fuego a dos núcleos de Cequeliños y Sande. En Gondomar se registraron dos incendios forestales durante la madrugada en las parroquias de Mañufe y de Chaín, aunque a lo largo del día se detectaron hasta siete focos en diferentes puntos. El fuego comenzó sobre las cuatro y cinco de la madrugada en Mañufe y quedó controlado hacia las 9.30.
La superficie afectada es de 25 hectáreas, de las cuales 20 son de terreno raso y cinco arbolados. En las tareas de extinción trabajaron dos agentes forestales, 3 brigadas, 3 motobombas y una pala. En la parroquia de Chaín, el incendió comenzó poco antes de 1.30 y quedó controlado nueve horas después.
La superficie afectada fue de 30.24 hectáreas arboladas. En las labores de extinción participaron tres agentes forestales, siete brigadas, cuatro motobombas y un helicóptero. A lo largo de la tarde se reactivaron dos focos, uno en la parroquia de Nande y otro en la de Vincios, que permanecían activos al cierre de esta edición.