El patrón de la trainera de Tirán, David Álvarez, espera que el triunfo conseguido en Orio les impulse hoy en la previa de La Concha
01 sep 2011 . Actualizado a las 06:00 h.David Álvarez tiene 32 años y desde los once milita en Tirán, el equipo de toda su vida. El patrón de la trainera moañesa jamás había encarado la previa de La Concha, que se celebra esta tarde, con una bandera debajo del brazo. El trapo que simboliza el año mágico de la Ruly y que dispara la ilusión para meterse en la fase final de la olimpiada del remo.
Tirán montó su cuartel general en Orio después de ganar la bandera de la localidad guipuzcoana. Llevan cuatro días pensando únicamente en la regata de hoy, que lejos de anunciar olas adivina el mar como un plato. Da igual, el equipo de Dani Pérez ha demostrado que ya sabe defenderse en cualquier escenario.
«¿Que como senta coller unha bandeira?, senta que nin dios», asegura el patrón de la Ruly, el único del equipo que ha disputado todas las banderas de la temporada hasta la fecha. David todavía tiene en la memoria el momento mágico jamás vivido por Tirán hasta el sábado pasado. «Chorei ao coller a bandeira polo esforzo de tantos anos», recuerda.
La conquista de la primera bandera ha sido un subidón que debe refrendarse esta tarde en La Concha, una regata cuya fase final se le viene resistiendo en los últimos años. «Estamos con confianza e o 100% fisicamente. A victoria chegou ademáis un día como moita ola, o que confirma que podemos remar en calquer escenario». A priori hoy deberían encontrarse con un territorio parecido en San Sebastián, pero el buen tiempo de los últimos días y un mar encalmado anuncian lo contrario. Otro argumento más para entrar en casi todas las quinielas, aunque en las apuestas hay quien todavía no confía demasiado en la embarcación gallega.
Alcanzar el punto álgido de forma recién iniciado septiembre no es una cuestión baladí. Dani Pérez tuvo la sangre fría de sacrificar a mediados de agosto el campeonato de España, y de rotar a casi todo el equipo todos los fines de semana, con el único objetivo de llegar pletóricos. «A nosa planificación ia encamiñada a conquerir a permanencia e a chegar o mellor posible a Concha. Na Liga as cousas saíron mellor do esperado e agora querémoslle poñer a guinda a temporada entrando entre os sete primeiros da Concha», acepta David Álvarez, que no quiere ningún tipo de confianza. Hace dos semanas se le rompió una bancada y se quedaron con un remero menos tres minutos, prueba inequívoca que cualquier imprevisto puede chafar una preparación. Además, Portugatele ha bogado como un tiro en la ARC 1 y será un rival de cuidado para los integrantes de la zona noble de la Liga ACT. Motivos para desconfiar.