Caballero rechaza el derribo de la cruz de los caídos

Juan Manuel Fuentes Galán
juanma fuentes VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

El Obispado se opone frontalmente a la retirada del símbolo político-religioso erigido hace medio siglo en O Castro

30 jul 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

«No la valoro». El alcalde de Vigo solo utilizó estas tres palabras para responder ayer a la pregunta formulada por La Voz en rueda de prensa, pero su breve parlamento fue transparente. Se le preguntaba por su valoración sobre la propuesta de la federación vecinal de que se retire la cruz franquista del monte de O Castro, erigida hace casi medio siglo en memoria de los caídas del llamado bando nacional.

Caballero no quiso hacer otro comentario que el citado y, por tanto, evidenció su rechazo a una retirada que en el momento actual encajaría con la vigente ley de la memoria histórica. Ajena a la oposición del dirigente socialista, el movimiento ciudadano prosigue con su campaña destinada a eliminar una cruz que mantiene a la vista las heridas de la guerra civil

De momento, el pasado jueves celebró un acto de recuerdo a los vigueses que se mantuvieron leales al gobierno de la República y que fueron represaliados por los alzados. Se celebró en el barrio de O Calvario y también participó en su organización la Asociación Viguesa por la Memoria Histórica.

Este colectivo es el verdadero impulsor de la campaña para eliminar la cruz de O Castro, algo que pudieron plantear a Caballero en la primera y única reunión que mantuvieron. A partir de ese momento el alcalde no ha accedido a reunirse de nuevo con ellos.

La intención de la federación es agrupar a una serie de colectivos sociales, ciudadanos y sindicales que defienden la eliminación de la cruz como símbolo precisamente de la barbarie y de la división de una sociedad. En tal caso confían en poder convencer al alcalde para que lleve a cabo su retirada.

A la vista de la respuesta que ayer dio Caballero a los periodistas no parece que entre en sus planes hacerlo. De hecho, las 4.000 firmas recogidas meses atrás por la federación vecinal no le han hecho cambiar de idea.

Oposición eclesial

En medios próximos al movimiento ciudadano no se explican la postura de Caballero y dan por sentado que el Obispado no pondría obstáculos. Sin embargo, las fuentes consultadas por este periódico indican justamente lo contrario: que los responsables de la Iglesia se oponen de manera tajante, pese a que en el último año accedieron a retirar los símbolos del bando nacional que decoraban algunas iglesias.

Esta medida afectó principalmente a la Concatedral y a Santiago de Vigo, donde figuraban una cruz, el nombre de caídos del bando franquista y en ocasiones loas a José Antonio Primo de Rivera. En un plazo de varios meses el Concello se encargó de retirarlas y procurar disimular las huellas que forzosamente han dejado en las piedras de los templos. Por lo que respecta a la directiva vecinal, este pulso por la eliminación de la cruz de O Castro es el primero que mantienen con el alcalde desde que hace algo más de un año llegaron a la federación tras una moción de censura.