Los dos despedidos inician una huelga de hambre, en paralelo al encierro
25 jun 2011 . Actualizado a las 06:00 h.Una semana encerrados en el parque. Y más. Los bomberos de O Porriño no se rinden y continúan su pelea por el conflicto laboral que mantienen con Celtaprix, la firma concesionaria del servicio, que cubre diez ayuntamientos de las comarcas de O Baixo Miño, O Condado y A Louriña. Los dos trabajadores despedidos (de un total de 17) mientras realizaban el período de pruebas anunciaron que iniciarán una huelga de hambre después de intentar, sin éxito, mantener una reunión con los responsables de la empresa.
Los afectados fueron los primeros en manifestar su intención de quedarse en el parque, aunque finalmente tuvieron que llevar su protesta al exterior del recinto. Tras dormir una noches en su vehículo particular a las puertas del edificio del polígono de As Gándaras, el resto de sus compañeros decidieron unirse y apoyar la medida, que se extendió también al parque de O Salnés.
Precisamente hasta allí trasladarán también sus protestas la próxima semana, después de intentar sin éxito realizar una concentración durante el pleno de constitución de la nueva composición de la Diputación. «Nos llegó el permiso rechazado, por falta de plazo, y como están muy serios con lo de las multas decidimos dejarlo», apuntó el representante sindical. Pese a este pequeño inconveniente, continuarán con la lucha. Los integrantes estudian presentar una solicitud de convocatoria de huelga, aunque cumpliendo los servicios mínimos exigidos por ley. También se ha hablado durante las asamblea de la posibilidad de realizar manifestaciones delante de los organismos públicos implicados en la gestión del consorcio.
Implicación
«Las administraciones no pueden desvincularse aunque nuestro contrato sea con otra firma, porque éticamente dependemos de ellos. Tienen que decir algo y no dejarnos de lado. La verdad es que nos sentimos totalmente desamparados», alegan desde el parque comarcal de emergencias.
Este problema coincide con la renovación de personal, motivada por la marcha de casi la mitad de las plantilla a otras instalaciones de emergencias. Fue entonces cuando se abrió un período de preparación para los sustitutos, que tuvieron que pasar pruebas prácticas y teóricas antes de incorporarse durante un tiempo de pruebas en el concello de O Porriño.
Mientras cinco de los que accedieron se quedaron en su puesto, otros dos fueron informados de su marcha pese a que, según los trabajadores, no existía ningún informe desfavorable del sargento ni de los demás mandos del parque. A raíz de esa decisión comenzaron las protestas.
En los 348 incidentes que cubrieron el año pasado salvaron a 46 personas
Además de fuegos, los bomberos participan en accidentes de tráfico.
En el 2010 realizaron 20 intervenciones más que en el año 2009.
46
35
20
Víctimas atendidas
Accidentes
Incremento