La imposibilidad de vender algún jugador el pasado verano provocó un desfase de 2,5 millones en las cuentas
03 nov 2010 . Actualizado a las 11:52 h.El Celta cerró por primera vez un balance contable con superávit. Las cuentas auditadas, sin ninguna salvedad, y que serán presentadas ante la junta general de accionistas a comienzos de diciembre, arrojan un saldo positivo de 472.473 euros. Además, el acuerdo concursal ha quedado cerrado en 21,4 millones de euros, cantidad que el conjunto vigués tendrá que pagar a lo largo de una década. Esta cifra unida a los 2,5 millones de euros de deuda post concursal (derivada en gran medida de la imposibilidad de vender algún jugador el pasado verano) establece la deuda global del conjunto vigués en 23,9 millones. En julio del 2008, cuando entraron en concurso los números rojos se disparaban hasta los 69 millones.
La entidad viguesa ha superado sin sobresaltos económicos la primera temporada después del concurso de acreedores. Las únicas partidas que alteraron el plan de ruta fueron la consignadas para la venta de jugadores y para el salario de la plantilla. Michu y Falcón estaban en el mercado el pasado verano, pero al final no hubo ningún comprador. Los únicos ingresos que llegaron, y que no están computados por entrar fuera de plazo, son los derivados de la venta de Rodrigo por el Real Madrid al Benfica (600.000 euros más 400.000 en concepto de formación) y de David Silva al Manchester City desde el Valencia (150.000 por derechos de formación). En cuanto a los sueldos, las salidas de Rubén González y Notario, la renegociación con Oubiña que no pudo plasmarse hasta el pasado verano y la inclusión del plantel del Celta B (hasta entonces a cargo de la Fundación) dispararon en 2 millones una partida inicial de 3,5.
En cuanto a los ingresos, la principal partida llegó vía publicidad (2,1), cien mil euros más que por televisión. Por taquillas y abonados tan solo 1,5, 600.000 euros menos de lo previsto. Como dato curioso, el equipo ingresó más por el partido de Copa del Rey con el Atlético de Madrid (352.157 euros) que en toda la Liga (162.388). En total la entidad ingresó 13,6 millones y gastó 13,2.
Conversión de Mouriño
A los números de la temporada hay que unirle el cierre del balance derivado del convenio de acreedores de la Ley Concursal. Tras convertir Mouriño 3,5 millones de euros que tenía pendientes en acciones, la entidad salió del concurso debiendo 21,9 millones de euros. El 80% de este dinero está afectado por el convenio con la Agencia Tributaria, que cobrará la cantidad a lo largo de los diez próximos años. Caixanova y algún acreedor minoritario cierren el círculo de fiadores.