Hija única, muy inquieta y, ante todo, perfeccionista que disfruta con la soledad y la naturaleza

La Voz

VIGO

08 may 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

Hija única, esa circunstancia marcó su personalidad. «No tenía con quien jugar y pasaba mucho tiempo sola en casa». Estudió en el colegio de doña Gloria, lo que ahora sería una escuela unitaria, y después en el instituto de A Guarda hasta que se trasladó a A Coruña para cursar Educación Física. Tras residir en esa ciudad cinco años y otros diez en Vigo, volvió a sus raíces de A Gándara, en el interior de A Guarda. Julia Vaquero se considera más de campo que de mar y perfeccionista en exceso. Pasaría las horas contemplando el horizonte y cargando las pilas para hacer frente a la vida si no fuera porque tiene una hija encantadora que pronto cumplirá siete años y por su carácter inquieto. Esa inquietud que le gastó alguna mala pasada, como cuando una vez, de pequeña, iba corriendo y se estampó contra un cristal. Casada en 1996, en la actualidad está separada. Valora lo que tiene y confiesa que de niña no le gustaba ir de vacaciones a Francia con sus padres. Su vida estaba en A Gándara. Disfruta con la lectura, la música y la playa.