Una de las paredes del garaje de La Voz ha servido de soporte a estos dos grafiteros vigueses para demostrar lo que son capaces de hacer con unos cuantos esprays
06 may 2009 . Actualizado a las 10:59 h.Más de cuarenta botes de espray, una escalera y ocho horas de trabajo. Es todo lo que necesitaron los grafiteros vigueses Sax y Antony para convertir una de las paredes del garaje de la delegación de La Voz de Galicia en una obra de arte. Cuando la sección celebró su primer año de existencia, le propusimos que le rindiesen un homenaje con su creatividad y no dudaron en aceptar el reto.
Sax y Antony llegaron a La Voz con las ideas claras y con el trabajo ya repartido. Ella se encargó de reproducir una imagen que tenía por casa de Lauryn Hill y él se ocupó de las letras. El primer día marcaron el diseño y dieron los colores básicos. Tras cuatro horas de trabajo, su obra ya comenzaba a impresionar a los que pasaban por el garaje. «Uno incluso nos pidió que siguiésemos con el resto del garaje», apuntaba Antony cuando recogían las cosas. Para la segunda jornada quedaba quizás lo más importante, los detalles. Antony ocupó las mayor parte de su tiempo en dar brillos y efectos en el interior de las letras de Emergentes. Paradójicamente, unas líneas blancas casi inapreciables en la imagen fueron una de las cosas que más trabajo le dio. Sax mientras se peleaba con los ojos. «Tuve que repetirlos unas cinco veces. Una de ellas le quedó un ojo mirando para Cuenca», recordaba entre risas, una vez acabado.
A la hora de hacer balance, ambos coincidían en destacar lo agradable que es trabajar sin presión, sobre todo, sabiendo que el resultado no se lo derribará el próximo temporal.