El jugador madridista reconoce que se le va a hacer difícil fuera del campo y aspira a que el equipo ascienda a la máxima competición nacional.
02 feb 2009 . Actualizado a las 21:04 h.El jugador del Real Madrid Míchel Salgado fue presentado hoy como nuevo presidente del equipo de hockey Vigo Stick Mundial 2009, que milita en la segunda división nacional. El jugador madridista se integra como presidente en la actual junta directiva del club, en la que también estarán dos personas de su confianza, Alberto Urbano y Javier Hidalgo.
El acto de presentación tuvo lugar en un hotel de la ciudad, con presencia de la toda la plantilla, cuerpo técnico y directiva del club, así como Xabier Alonso, Concejal de Deportes del Ayuntamiento de Vigo, y de la Directora Xeral para O Deporte de la Xunta de Galicia, Marta Souto.
El nuevo dirigente del cuadro vigués reconoció que «se me va a hacer difícil ser presidente cuando yo siempre he estado en el campo, pero creo que era el momento de apoyar este proyecto para hacer un equipo potente, estabilizar al club a nivel económico y deportivo en la máxima competición nacional, la OK Liga. Además, este verano organizaremos el Mundial», recordó, en referencia al campeonato del mundo de hockey que se celebrará el próximo verano en la ciudad.
Sobre su nueva experiencia como directivo, el futbolista reconoció estar ante «un reto y un aprendizaje. Cometeremos errores -dijo-, pero creo que hoy es un día importante para el Vigo Stick, para Galicia y para mi». De los jugadores, resaltó que «han pasado momentos difíciles, han estado sin cobrar, han aguantado y han apostado por éste proyecto, y es el momento de devolverles esa confianza».
Preguntado por su nuevo compañero Julián Faubert, comentó que «aún no nos conocemos, pero creo que es un jugador que nos va a aportar potencia por la banda». «Todo lo que sea sumar -agregó- siempre va a ser bienvenido, nos quedan todavía dos competiciones y va a ser complicado porque el Barça no afloja».
Del cuadro catalán, expresó su frustación por la gran marcha de los de Guardiola, pues, «cuando parecía que iba a pinchar y se nos iban a poner algo mejor las cosas, aparece Messi y lo soluciona. De todos modos, queda mucho aún por delante», agrehó.
Finalmente, sobre la posibilidad de volver a vestir la camiseta del Celta, afirmó que «nunca podría cerrar las puertas al Celta, porque es el club donde me crié y nunca se sabe lo que puede pasar», aunque concluyó que «tengo dos años en el Real Madrid y ahora estoy centrado en eso, no me gusta pensar en el futuro a largo plazo».