Un nuevo estudio del equipo del Valedor do Cidadán de Vigo indica las actuaciones a seguir para reducir las emisiones de gases, y por tanto, la contaminación de la ciudad, que supera a la de ciudades con mucha más población como es el caso de Barcelona.
El trabajo, concluido recientemente en inglés y gallego, se presentará a la opinión pública en septiembre y supone una continuidad con el elaborado recientemente sobre la situación de Vigo en lo que a contaminación atmosférica se refiere.
La idea es facilitar un instrumento, no solo al Concello de Vigo, sino a los de otras ciudades, para mejorar la calidad de vida. Con tal motivo se han enviado ejemplares a 400 ciudades europeas de 28 países. En el caso concreto de Vigo se trataría de mejorar la cifra de contaminación actual, de 5,5 toneladas anuales de dióxido de carbono por habitante. El tráfico es la principal causa de contaminación hasta el punto de emitir al aire cada año un total de 815.000 toneladas de dióxido de carbono, según informes del Ministerio de Medio Ambiente y de la Fundación Ecología y Desarrollo.
Y es que, la escasa utilización que todavía se hace del transporte público lleva a diario a los viales de la ciudad a más de 325.000 vehículos, una cifra muy alejada de la recogida en el Plan Estratégico Provincial, que lo cifraba en 100.000.
Precisamente una de las causas que sitúan a Vigo por encima de Barcelona en cuanto a contaminación atmosférica es la masiva utilización del vehículo privado, junto con el menor uso del gas natural.
La propia Comisión Europea demuestra que el 21% de la contaminación del viejo continente se debe a los tubos de escape.
En Galicia, el 80% de los gases tienen su origen en el motor de los vehículos.
La falta de un sistema de trenes de cercanías con localidades próximas como O Porriño o Mos, en las que se sitúan buena parte de las empresas, contribuye, sin duda, a fomentar el uso de vehículo particular. Tampoco favorece mucho el tiempo medio de recorrido empleado por el autobús urbano.